El austriaco de origen rumano Marius Vizer. Autor: Calixto N. Llanes Publicado: 21/09/2017 | 05:44 pm
La Federación Internacional de Judo (IJF, por sus siglas en inglés), continúa su «chequeo» de cara al Gran Prix que en junio próximo se disputará en La Habana. Ese es el principal motivo de la visita a la Isla de su presidente, el austriaco de origen rumano Marius Vizer.
Este viernes, el federativo ofreció una conferencia de prensa en el Salón de Actos de la Ciudad Deportiva capitalina. Allí explicó las razones por las cuales Cuba acoge este certamen, que será el primero del año en tributar puntos para el ranking mundial de la IJF, con vistas a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.
«Cuba ha obtenido excelentes resultados a lo largo de la historia por la calidad de sus atletas, que han obtenido títulos mundiales y olímpicos. Independientemente de los problemas económicos, el judo cubano ha contribuido a un mayor desarrollo de este deporte a nivel mundial», expresó.
Vizer, presidente además de la SportAccord —organismo internacional que engloba a las federaciones de todos los deportes, olímpicos o no—, aseguró que el Grand Prix de junio abrirá una puerta a los valores de la sociedad cubana, no solo deportivos sino también culturales.
«Este certamen será transmitido a más de 135 países, y contará con la presencia de aproximadamente 400 judocas, glorias de esta disciplina, así como otras personalidades. Entre los invitados estarán los ministros de Deportes de varios países, así como figuras retiradas del aval del futbolista alemán Lothar Matheus y los rumanos Nadia Comăneci (gimnasta) e Ilie Năstaseel (tenista)», aseveró el máximo dirigente de la IJF.
Interrogado sobre las últimas modificaciones de las reglas en el judo, Vizer certificó que el objetivo es mejorar el nivel del vetusto arte marcial, hacerlo más dinámica y mucho más fácil de comprender, tanto por árbitros como por los espectadores que siguen de cerca los oguchis e ippones.