El combativo Liván López (encima) en un torneo en Cuba. Foto: Calixto N. Llanes Autor: Calixto N. Llanes Publicado: 21/09/2017 | 04:51 pm
GUADALAJARA.— Con un metal áureo culminó para Cuba la primera jornada masculina de lucha libre, emotiva por demás al convertirse en el título 800 para la Mayor de las Antillas en la historia de los Juegos Panamericanos.
El medallista de oro fue Liván López, de la división de 66 kilogramos. El criollo llegó a esta final luego de quedar bye en la primera ronda y derrotar en cuartos de final al colombiano Edison Hurtado por superioridad técnica. En semifinales dominó 2-0 al estadounidense Teyon Ware y logró su pase a la discusión del título. La última escalada al colchón fue ante el boricua Pedro Soto, quien cayó abrumado por la superioridad técnica del antillano.
Luego, Humberto Arencibia (84 kilogramos) terminó con presea de plata al caer ante el estadounidense Jacob Herbert 2-0. Arencibia había vencido en su primer combate al canadiense Jeffrey Adamson y luego derrocó en semis por idéntico marcador al brasileño Adrian Jaoude, lo que le dio el pase a la final.
Finalmente, Disney Rodríguez ocupó el tercer escaño tras ganar el duelo ante el ecuatoriano Carlos Delgado. El cubano ganó su primera presentación ante el mexicano Jesse Ruiz por 2-0 y luego cayó contra el estadounidense Tervel Dlagnev con el mismo pizarrón, por lo que tuvo que luchar por la presea de bronce.
Este lunes cierra la lucha, con peleas en las divisiones de 60, 74 y 96 kilogramos.