Los campeones nacionales conjugan una artillería pavorosa con un respetable picheo y una intelegente dirección
Por si había duda, Ormari Romero hizo su trabajo durante cinco entradas, en las que permitió tres hits, y allá fueron los relevistas a completar el triunfo de Santiago de Cuba sobre la Isla de la Juventud.
Entonces, los campeones nacionales no solo exhiben una artillería pavorosa: también sus tiradores, hasta los más veteranos, defienden la trinchera con acierto, y muy bien administrados por Antonio Pacheco.
Otros expertos que disertaron en la lomita fueron Luis Miguel Rodríguez ante Metros (ocho ponches y tres hits en ocho innings); Manuel Vega en perjuicio de Matanzas (dejó a siete con la carabina al hombro, en siete capítulos); Adiel Palma, también con siete abanicados ante Ciego de Ávila, en el mismo lapso, y Yulieski González, que burló a nueve camagüeyanos.
Los jonrones volvieron a resonar la víspera, 20 en total, para elevar la cuenta a 86. Los héroes individuales fueron el espirituano Liván Monteagudo, que dio uno, y el pinareño Yosvany Peraza, que pegó dos, y cada cual llegó a cuatro vueltas al cuadro.
El «niño» Linares en PanamáComo resultado del Convenio de Cooperación Deportiva entre Panamá y Cuba, llegó a la capital canalera el legendario pelotero pinareño Omar Linares, quien ofrecerá sus conocimientos como entrenador de bateo en la provincia de Veraguas, reporta el diario La Estrella de Panamá.