Los mexicanos entraron por «carambola» a los cuartos de final. Foto: AP ¿México o Panamá?, se preguntaban este jueves los aficionados cubanos, cuando el diario Granma anunciaba a los aztecas como rivales de Cuba en los cuartos de final de la Copa Mundial de béisbol con sede en Taipei de China. Nuestra página, en cambio, hablaba de un choque entre criollos e istmeños.
Sucedió que la Federación Internacional de béisbol (IBAF, por sus siglas en inglés) sancionó al equipo panameño por alinear con cinco jugadores que militan en franquicias de Grandes Ligas, sin haber pagado a tiempo el seguro exigido por estas.
Y así, por unos billetes de más o de menos, se fue del evento una novena que había clasificado en buena lid.
Pero todo ello aconteció después del cierre de nuestra edición, dada la gran diferencia de horarios que existe entre Cuba y Taipei de China. ¿Cómo pudo publicar Granma el cambio? Sencillamente porque tiene un reportero en la nación asiática, y Juventud Rebelde no. Desde la redacción, dependemos de los despachos cablegráficos o el sitio web de la IBAF, y estos comenzaron a actualizarse en la madrugada de ayer. De todas formas, como nuestro deber es informarlos y en este caso no lo hicimos, les ofrecemos excusas a los lectores.
En Panamá la noticia también tomó por sorpresa a los fanáticos, quienes dormían contentos cuando se desencadenaron los hechos. Reporta Prensa Latina que el asunto cayó como un jarro de agua fría sobre la gente, que esperaba un nuevo choque contra Cuba.
¡Qué vergüenza!, exclamó la influyente comentarista de la televisión local, Lucy Molinar, al presentar las noticias deportivas en su noticiero estelar de la mañana.
Considerada la entrevistadora más incómoda y mordaz de la televisión panameña, Molinar se preguntó cuándo terminarán los errores de Franz Weber, presidente de la Federación Panameña de Béisbol. Incluso, exhortó a peloteros de prestigio y atletas retirados para que tomen las riendas del deporte.
Una reacción parecida se generalizó en los demás espacios deportivos de la prensa radial y televisiva, primeros que pudieron comentar el incidente. Otros medios recordaron que Franz Weber se encuentra involucrado en el conflicto de poderes que mantiene paralizado al Comité Olímpico de Panamá y puso a los atletas del istmo al borde de la exclusión de los pasados Juegos Panamericanos.
«Weber acepta la culpa», escribió en su titular el periódico La Prensa, aunque el dirigente alegó que «había un arreglo verbal que permitía competir a los jugadores de Grandes Ligas».
«Lamentablemente, nos sacaron del campeonato por un tecnicismo abordado a última hora, después de habernos ganado la clasificación. Esperaron hasta el último partido contra Sudáfrica para hacerlo. Para mí es un pase de factura, pues si bien cometimos una falta administrativa —no pagar el seguro—, eso se subsanó en tiempo y hubo un acuerdo para que Panamá jugara, que contó con la anuencia de la comisión técnica del evento», dijo en tono molesto el federativo panameño Elvis Polo.
Por su parte, Eduardo De Bello, presidente de la Confederación Panamericana de Béisbol (COPABE), se mostró en desacuerdo con la medida. «Fueron confiscados oficialmente los juegos contra España y Estados Unidos, pero tengo mis dudas de que haya sido lo correcto. No es justo que un equipo que se ganó la clasificación en el terreno la pierda en la mesa».
En fin, que la Copa terminará caliente, dentro y fuera del diamante. Al cierre, se disputaban los cuartos de final con el siguiente menú: Australia-Japón, Estados Unidos-Corea del Sur, Holanda-Taipei de China y Cuba-México.