Por estos días el libro Guinness de los Récords Mundiales tiene nueva edición y muchos quisieran aparecer en sus páginas. A eso aspiran 1 003 estudiantes, profesores y empleados de la Universidad Ryerson, de Toronto, que interpretaron Don’t Fear the Reaper acompañados de una banda local de rock.
¿Lo peculiar? Pues los instrumentos: cencerros de vacas, las tradicionales campanas que identifican a las lecheras cuando pacen en bucólicos paisajes de montaña.
Los canadienses afirman que le quitaron el récord del año 2009 a un grupo suizo de 640 campanilleros.