Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

El «caballo» del humor

Antonio Berazaín, en los legendarios 80 del siglo pasado, formaba parte del reconocido Movimiento de Jóvenes Humoristas y ya componía canciones, hacía parodias y también escribía guiones e historias de hilarante contenido

Autor:

JAPE

Igual que es conocido el pelotero cubano Alfredo Despaigne como el «Caballo de los caballos» por su destacada actuación deportiva con su equipo de los Alazanes de Granma, nuestro invitado de hoy también se nos hace familiar cuando mencionamos el conocido cuadrúpedo equino. En el caso del Bera, su referencia nos llega siempre desde su cordial y campechano saludo: ¡Dime caballo!

Efectivamente, hoy estaremos hablando y dando su merecido lugar en la cultura nacional a Antonio Berazaín Iturralde. Escritor, profesor investigador y humorista cubano. Máster en Didáctica de la Física. Profesor auxiliar y en su momento vicerrector del Instituto Superior de Diseño (ISDi).

Nos conocemos desde los legendarios 80 del siglo pasado, cuando formaba parte del reconocido Movimiento de Jóvenes Humoristas y ya componía canciones, hacía parodias y también escribía guiones e historias de hilarante contenido y profunda elaboración.

Aunque su hijo Adrián es quien ahora marca la pauta mediática de los Berazaín, puedo asegurarles que El Bera, como todos lo conocemos, goza de gran prestigio y enorme consideración dentro del gremio de los humoristas y en particular de los diseñadores, porque muchos de ellos fueron sus alumnos y porque con este inigualable pedagogo aprendieron a ver la vida y la profesión desde el punto de vista más divertido y eficaz: el humor.

Ahora tengo ante mí un extenso currículum difícil de igualar e imposible de resumir en un par de párrafos. Nuestro amigo, además de haber explorado todos los formatos del humor, con soporte en la música, el teatro, la literatura, la radio, los audiovisuales… es un
excelente científico. No de manera «metatrancosa», como hubiera evaluado Zumbado, a quien Antonio dedicó una de las más recientes antología editadas en Cuba.

Berazaín ha encontrado, promovido y practicado un ingenioso y necesario acercamiento de los conceptos más complejos de la Física, las matemáticas, el diseño… y la vida, con el agudo y práctico ojo del humorista, dejando por sentado que «el humor va más allá de la risa. El humor es la actitud ante la vida, algo muy serio que ayuda a la creación artística y que en caso de perderse la esperanza queda como sostén emocional».

Como antes dije, la obra de nuestro invitado es extensa y polifacética, sin embargo, más allá de libros, publicaciones, conferencias, talleres… yo destacaría como su más auténtica creación la Peña La Rasak, que por más de 20 años sostuvo como espacio transcendental del sistema de actividades que se desarrollaban en el Instituto Superior de Diseño. Música, danza, poesía, artes plásticas… todas las manifestaciones artísticas expresadas con buen humor. Un magnífico ambiente donde coincidía el talento que albergaban nuestros centros de estudios superiores, con el trabajo que realizaban profesionales y amateurs de todo el país. Muchos de nuestros reconocidos humoristas, diseñadores, ingenieros, doctores… alguna vez participaron en este genial e inclusivo mundo que se extendía por dos horas, una vez al mes, en la universidad del diseño.

Antonio Berazaín ha recibido notables distinciones por su trabajo dentro y fuera de nuestro país. Entre las labores que más lo identifican está el guion de la multipremiada obra teatral, convertida en serie audiovisual, Sabor Bohemio.

El Bera ha visto impresos sus textos en diversas publicaciones: dedeté, Palante, y en Alma Mater, donde desde octubre de 2007 a febrero de 2009 escribió en una sección fija llamada ¿Quién le pone al cascabel al látigo?, que fuera creada por el escritor y poeta José León.

Participó en múltiples antologías de cuentos y guiones de humor. Actualmente es uno de los guionistas, fundador además del gustado y popular programa televisivo Vivir del cuento.

Es muy breve el espacio y muy grande la obra y el aprecio que sentimos por este amigo tan modesto, de sui géneris y característico saludo. Insisto en que sería de mucho provecho, sobre todo para nuestros alumnos universitarios, buscar, disfrutar y aprender de lo tanto que ha contribuido al buen reír y a la pedagogía este maestro de maestros, el caballo de los caballos, en el humor.

Abraham Fedor Águila Olmo (Feddor). Caricaturista colaborador de Melaíto, que también publicaba en Palante y dedeté.  En 1989, obtuvo el mayor lauro que concede Chispa Joven, convocatoria de Palante para reconocer a los mejores historietistas cubanos. Recibió premios nacionales e internacionales y participó en múltiples murales públicos en las paredes de diversos lugares de Santa Clara.

¿Español o inglés?

Hace ya algunos años, alguien me comentaba —en tono de burla— lo ridículo de los nombres de algunos grupos musicales de origen latino que estaban de moda entonces: Los Terrícolas, Los Pasteles Verdes, etc., al tiempo que insinuaba que los de origen anglosajón tenían más «onda». En parte tenía razón, porque en verdad esos nombres estaban cheos, pero al analizar los correspondientes a grupos musicales ingleses o norteamericanos y traducirlos a nuestro idioma observé que la situación no era mucho mejor. Imagínense, grupos como Reina, Púrpura Profunda, Pistolas y Rosas, Los Muchachos de la Playa. Parecía increíble que la banda de Jim Morrinson se llamara Las Puertas.

El tema volvió a mí recientemente en un evento científico internacional, en el que un colega español defendía la práctica de los textos ibéricos de «españolizar» los términos ingleses. Por ejemplo, las unidades en Física. Así, hablan de «julios» y «vatios».  Nada, que si Joule o Watt resucitan, al ver eso, se vuelven a morir.

Tal situación me hizo imaginar una conversación entre dos informáticos españoles:

—Dime, Paco, ¿qué programas utilizas en el sistema operativo Ventanas XP?

—Bueno, Manolo, tú sabes que mi ordenador tiene una buena tarjeta madre y un ratón óptico de la ostia, por eso, por ejemplo, hago mis cartas en el programa Palabra, que pertenece a la Oficina de Microsuave.

—¡La de Dios! Pues yo para mis presentaciones en las conferencias utilizo El Poder del Punto.

—Vale, ¿y para leer los textos en extensión PDF?

—Hombre, pues qué va a ser: El Lector Acróbata Profesional. Ven acá, Paco, ¿y para el tratamiento de imágenes, qué?

—¡Madre mía! Hay varios, pero yo utilizo el Pintura y la Tienda de Fotos de Adobe.

—Yo también los uso. Y supongo que para ver los correos electrónicos lo hagas con el Expreso Mirafuera.

—Claro, y veo mis videos con el programa Tiempo Rápido para Ventanas.

—Ya te digo, Paco, esto de la informática, con su duroware y su suaveware es tremendo.

—Tienes razón, Manolo. Por suerte hay bastante información en la Entrered.

Creo que no merece comentarios. Además, estoy apurado. Voy a ver la última temporada del Doctor Casa… disculpen.

Antonio Berazaín (Bera), dedeté, segunda generación

 

Comparte esta noticia

Enviar por E-mail

  • Los comentarios deben basarse en el respeto a los criterios.
  • No se admitirán ofensas, frases vulgares, ni palabras obscenas.
  • Nos reservamos el derecho de no publicar los que incumplan con las normas de este sitio.