El Jefe de Estado participó este miércoles en el municipio avileño de Chambas en un momento especial para nuestros pioneros moncadistas. Autor: Estudios Revolución Publicado: 08/10/2025 | 11:17 pm
CHAMBAS.— Hay un momento cristalino, sagrado para toda familia cubana, y es ese en el cual toca poner el uniforme al hijo y armarlo para que llegue impecable a su escuela. No importa cuántas dificultades haya, no importa si muchas cosas faltan, pero todos los hijos de la Isla llegarán expectantes al encuentro con sus condiscípulos y maestros.
Este 8 de octubre no fue diferente, y se diría que tuvo especial sentido en cada patio de escuela, porque se conmemoraba otro aniversario de la caída del Guerrillero Heroico, y cada niña o niño que cursan el primer grado fue investido con su pañoleta azul, la de pionero Moncadista.
Esta mañana de miércoles daba gusto ver la escuela primaria Antonio Maceo, en el municipio de Chambas, en la provincia de Ciego de Ávila, hasta donde llegó el Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, acompañado del miembro del Buró Político y secretario de Organización del Comité Central del Partido Comunista, Roberto Morales Ojeda, así como de autoridades del territorio, en el habitual estilo de trabajo de recorrer el país para conocer de primera mano el funcionamiento de diversas experiencias.
Anchuroso, con una matrícula de 641 estudiantes, el centro docente ostenta la fortaleza de poseer el ciento por ciento de su claustro cubierto. De tal modo lo explicó a los reporteros, con orgullo, la directora Minerva de la Caridad Rodríguez Escobar, quien destacó los buenos resultados académicos del centro.
En un matutino donde hijos, padres y maestros confluyeron para verse con la Patria y anudar las pañoletas a 88 niños, el Presidente puso el símbolo azul sobre los hombros de una niña; y en ese gesto, era como si miles de padres hicieran lo mismo, al unísono, en una jornada que se repite, con amor, año tras año.
Esfuerzos que dan resultados
El siguiente punto en el itinerario fue la Planta de Producción de Arena Nguyen Van Troi, perteneciente a la unidad empresarial de base (UEB) Canteras Chambas. Allí, Asdrúbal Pérez, director de la entidad, explicó al Jefe de Estado que las producciones de arena beneficiada, arena artificial, granito y grava de río, tienen como destinos el programa de instalación de parques fotovoltaicos, la construcción de viviendas y otras inversiones, como las que se realizan en el sector del turismo.
El dignatario quiso conocer detalles sobre la estabilidad de la fuerza laboral, los beneficios que los trabajadores reciben, y el uso de la ciencia y la innovación. ¿Cómo mantienen el flujo productivo en medio de la compleja situación electroenergética?, indagó el Jefe de Estado, ante lo cual le explicaron que el camino de solución ha sido crear grupos de trabajo que entran en acción según la disponibilidad del servicio eléctrico.
La visita tuvo como siguiente destino a la finca El Tesoro, aledaña a la comunidad La Oriental y perteneciente a la empresa agroindustrial de Chambas; esta última, con un área física total de 6 500 hectáreas, de las cuales 5 068 están siendo utilizadas en la producción de arroz.
Allí los resultados son alentadores: la campaña de primavera cerró el plan al 103 por ciento. Por eso el productor Alexei Marrero afirmó al mandatario que no hay problema alguno que impida cumplir. «Nosotros queremos en el menor tiempo posible —expresó Díaz-Canel—, autoabastecernos».
El Presidente mostró especial interés en saber si la empresa tiene autoconsumo; y si en el cultivo del arroz están siendo aplicados los bioproductos. Y quiso saber si, con las producciones que tienen, los trabajadores pueden mejorar sus vidas. «Si hay arroz, que ganen», razonó en alusión al derecho que tienen a prosperar quienes mucho se esfuerzan y lo hacen con resultados.
Pasajes alentadores
La dirección del país fue también hasta el municipio de Ciro Redondo en la provincia de Ciego de Ávila. Allí, el primer punto visitado fue una minindustria ubicada en la Finca La Candelaria, perteneciente a la Cooperativa de Créditos y Servicios (CCS) Patricio Sierralta.
Nacen de ese lugar producciones en conserva a partir del coco, la guayaba, el tamarindo, la cereza o el marañón. En envases pequeños, o de mayor formato, podía verse el zumo de limón, o la pulpa de mango o el coco rallado.
Díaz-Canel conoció acerca de la vinculación de esa entidad con los conocimientos que se derivan de la ciencia y la técnica. En la minindustria, por ejemplo, son de mucho valor los estudios que emprende el Doctor en Ciencias Miguel Ángel Iparraguirre, enfrascado en la obtención de un biofertilizante de alta calidad.
Otro punto en la agenda fue el centro colector Pina, de la UEB Producción Majagua, donde se extrae un petróleo ligero, destinado fundamentalmente a la elaboración de combustible diésel, aceite dieléctrico para transformadores, y asfalto. Allí explicaron a la dirección del país acerca de cómo transcurre el proceso productivo, así como sobre las limitaciones materiales que marcan la extracción del hidrocarburo.
Buenas señales en Jatibonico
En horas de la tarde, en el municipio de Jatibonico en la provincia de Sancti Spíritus, el Presidente visitó la Finca La Belkys, perteneciente a la Unidad Básica de Producción Cooperativa (UBPC) Argelio Calderón, de la Empresa Agroindustrial Azucarera Uruguay.
El productor Osmany González Luzardo explicó a la dirección del país que cuentan con una extensión de 50 hectáreas, sembradas de frijoles, cebolla, maní y boniato. Son esfuerzos destinados a la industria y a centros priorizados del territorio, que tienen un impacto social.
A pesar de las limitaciones que implica la compleja situación electroenergética, seguir acrecentando las producciones hasta donde sea posible es el objetivo esencial de los trabajadores. Este miércoles, desde el surco, el Presidente Díaz-Canel dijo a quienes se han esforzado con resultados notables: «Aquí hay una cultura de trabajo tremenda. Miren cómo están las plantaciones…».
El otro lugar en el recorrido fue un área sembrada de caña, también perteneciente a la UBPC Argelio Calderón. Allí explicaron al mandatario sobre la estrategia de seguir creciendo en ese tipo de cultivo. Entre trabajadores y directivos, el Jefe de Estado hizo énfasis en la importancia de diversificar producciones, siempre teniendo presente la necesidad de sembrar todo el alimento que sea posible.
Seguidamente la visita llegó al taller de maquinarias que igualmente pertenece a la Empresa Uruguay. Allí el mandatario pudo observar el equipamiento con que cuentan para el aseguramiento de la zafra azucarera y otras actividades de la agricultura.
El objeto social de la entidad, como explicaron al Jefe de Estado, es fabricar y reparar piezas con las cuales asumir los retos productivos de la empresa.
Este 8 de octubre, en la agenda de la dirección del país, empezó por una escuela, poniendo pañoletas azules a los pioneros más pequeños. Y no es fortuito que haya seguido por escenarios como la tierra, esa que tanto tributa al bienestar: el Che Guevara hubiera estado haciendo lo mismo si estuviese en la Isla; hubiese estado auscultando surcos, fábricas, colectivos de campesinos y de obreros; hubiese estado dando la batalla por una Cuba más fortalecida y humana.