Michelle Curto, de pie, presidente de la Agencia para el Intercambio Cultural y Económico de Italia con Cuba (Aicec), reconoció la utilidad de la mipyme. Autor: Alexey Mompeller Lorenzo Publicado: 09/02/2023 | 07:24 pm
CABAIGUÁN, Sancti Spíritus.— Hace alrededor de 20 años que las manos e ingenio del tornero Alexis Concepción Santos pusieron a andar la primera máquina para producir láminas de cualquier residuo de madera.
«Fue resultado de la necesidad —recuerda Yarisel Concepción Pérez, su hija y testigo fiel de esa historia—. Esa primera era para trabajar en la artesanía».
Y quizá no imaginaron entonces que un tiempo después el «criollo artefacto», tras varias adecuaciones, permitió crecer en niveles de producción y calidad hasta obtener los estándares establecidos en las láminas de madera utilizadas en las cajas de tabaco de exportación.
«Se logra por la transformación mecánica de la madera en bolo a finas hojas, proceso que se nombra laminado de la madera», enfatiza quien es hoy socia y comercial de Laminados Concepción, mipyme cabaiguanense que ya ha logrado ahorrar al país alrededor de un millón de dólares por concepto de sustitución de importaciones.
De acuerdo con publicaciones mediáticas, Cuba adquiere en el mercado exterior alrededor de tres millones de láminas a un costo cercano a los 900 000 dólares. Gracias a esta empresa cabaiguanense, se logra que la economía de la nación tome un pequeño respiro.
«Nuestra capacidad productiva es de alrededor de tres millones de láminas entrecamadas de cedro para los envases de tabaco en el año. Y, por los resultados y experiencias ya estamos diversificándonos en otras producciones».
La máquina, nacida del ingenio del tornero Alexis Concepción, permite obtener las finas piezas desde los bolos de madera. Foto: Alexey Mompeller Lorenzo
En vitrinas
La 38va. Feria Internacional de La Habana (Fihav), le vino como anillo al dedo a Laminados Concepción. Superó con creces todas sus expectativas al sentir varios ojos interesados en sus producciones.
Uno de ellos ya consolida las posibilidades de negocio. Michelle Curto, presidente de la Agencia para el Intercambio Cultural y Económico de Italia con Cuba (Aicec), visitó recientemente Cabaiguán a fin de obtener un diseño de un envase de madera para empacar café orgánico. De esa forma se conectarán el pequeño grupo de emprendedores con Lavazza, compañía torrefactora de café legendaria en Torino desde 1895, líder de exportaciones en el país europeo por la mezcla de las variedades arábica y robusta.
«Desarrollaremos conjuntamente el producto demandado», insiste Concepción Pérez.
Para Aicec resulta esencial respetar el concepto forestal-integral, y aspira a largo plazo lograr un mayor empleo de maderas originarias de Cuba para la fabricación de estuches sin que medie otro recipiente para almacenar el café.
En tierras cabaiguanenses, esta oportunidad ha traído grandes alegrías, y sobre la mesa del pequeño grupo, liderado por Alexis Concepción Santos, ya se mira con lupa las condiciones de trabajo. Aseguran que disponen de los recursos, la lámina extrafina que necesita Lavazza y del equipamiento. Solo les resta regular la maquinaria.
Para Laminados Concepción el término encadenamiento productivo no es nuevo. Con la Empresa Agroforestal Sancti Spíritus han dado los primeros pasos.
«Resaltamos nuestro interés por su capacidad de innovación, con un concepto totalmente de economía circular que contribuye a sustituir importaciones a la Isla», opinó Michelle Curto durante su recorrido por el pequeño local de la empresa.
Junto a ese tentador proyecto, la mipyme se orienta hacia otros destinos comerciales: «Hay otras proyecciones hacia la exportación de nuestros productos. Hemos firmado contrato para suministrar la red de tiendas nacionales, los polos turísticos. Como plan inmediato tenemos la oportunidad de participar en el 23ra. edición del Festival del Habano, a celebrarse del 27 de febrero al 3 de marzo. Nuestra aspiración es ampliar la variedad de productos e insertarlos a la exportación», añadió la comercial de la empresa.
Con algunos escollos
Alexis Concepción, socio y director; Yarisel Concepción, socia y comercial; Livan González, tecnólogo, y Marisel Pérez, al frente del control de calidad, han experimentado en carne propia las secuelas de las demoras en trámites y no pocos burocratismos.
«Por ejemplo, recibimos la materia prima a través de la Empresa Agroforestal Sancti Spíritus y en algunas ocasiones se han presentado dificultades con la transportación. Hasta este momento no hemos podido tener acceso a la importación de un vehículo de carga que es la principal necesidad que tiene la mipyme. No obstante, estamos convencidos de que ha valido la pena incursionar como empresa ya que se ha demostrado que podemos hacerle aportes significativos a la economía de nuestro país, principalmente cuando se encuentra encadenada».
Con esa máxima labora diariamente Laminados Concepción, desde que uno de los integrantes de la mipyme se va al monte para supervisar la selección de la madera —«se garantiza así altos rendimientos y calidad», acota la joven Yarisel— hasta que el olor fresco de las láminas de madera espabila los más exigentes olfatos.