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Orgullosos y seguros de nuestra juventud

Como parte de la tercera visita gubernamental a Santiago de Cuba el Presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez recorrió el Polígono Barquillo, la sede del Archivo Histórico y palpó el aporte joven al enfrentamiento a la COVID-19 y los impactos del quehacer investigativo de la Universidad de Oriente

 

Autor:

Odalis Riquenes Cutiño

SANTIAGO DE CUBA.— Solo se puede llegar a ese desarrollo próspero y sostenible al que aspira el país usando la innovación, y en eso van a jugar un papel siempre fundamental y protagónico nuestras universidades, recalcó la víspera aquí el Presidente cubano, Miguel Díaz-Canel Bermúdez.

En fraterno intercambio, acaecido al final de la tarde de este jueves, con estudiantes y profesores de la Universidad de Oriente (UO), en el que se evaluó el impacto de la ciencia generada desde el Alma Máter oriental, el Jefe de Estado encomió el apoyo ofrecido por las universidades y el sistema de instituciones de la Educación Superior a la transformación de la visión social sobre el papel de la investigación científica y la innovación en la solución de problemas a nivel territorial y de país.

 En otro momento, el mandatario demandó de la comunidad universitaria oriental profundizar su acompañamiento en líneas que hoy constituyen retos para conseguir la implementación adecuada de la Estrategia económica y social pos-COVID-19, entre ellos  el desarrollo de los sistemas productivos locales, el avance de la Tarea Ordenamiento y la urgencia de encauzar  procesos de informatización como el comercio y el gobierno electrónico.

En el encuentro, además, se conoció de las experiencias de recién graduados como el licenciado en Biología Asiel Cabrera, a quien la responsabilidad de sumarse al Laboratorio de Biología Molecular de la provincia le ha hecho crecer humana y profesionalmente.

Trascendió, asimismo, en el encuentro que la UO participa en los análisis con organismos del territorio para la creación del parque científico-tecnológico de Santiago de Cuba y se han instalado en el sector empresarial 944 dispositivos magnéticos vinculados a sectores estratégicos como el electroenergético, la industria azucarera y la producción de alimentos.

La UO cuenta con más de 3 300 estudiantes que se forman en carreras vinculadas con la producción de alimentos y diez proyectos relacionados con esta temática, y  trabaja otros 11 proyectos con entidades  que son evidencia de los vínculos cada vez más  fuertes del centro de altos estudios con el sector empresarial.

En otro momento de la jornada, el Presidente cubano recorrió la nueva sede del Archivo histórico de Santiago de Cuba, que atesora importantes fondos ligados al devenir de la urbe santiaguera y las gestas independentistas cubanas, más del 20 por ciento de los cuales se encuentran hoy digitalizados.

Díaz-Canel calificó el inmueble como una sede a la altura de lo que merece la ciudad de Santiago de Cuba e instó a su colectivo a mantenerlo como una fortaleza en la preservación de la memoria histórica.

En áreas del Polígono Barquillo, el mandatario pudo apreciar los frutos del empeño santiaguero para la conquista de la soberanía alimentaria y el ahorro energético. La entidad, en la que cotidianamente se producen 4,3 toneladas de 85 surtidos en siete áreas productivas, es de referencia en el uso de extensores de viandas para la producción de panes, dulces y galletas de calidad, con el ahorro de 230 kilogramos de harina por cada tonelada de alimento. Igualmente es abanderada en el empleo de fuentes renovables de energía, como la solar, y otras alternativas como el carbón y la leña.

Pero, sin duda, un emotivo momento de este jueves lo constituyó el intercambio del Presidente Díaz-Canel, en áreas del teatro Heredia, con más de un centenar de jóvenes que desde diferentes sectores se impusieron a temores y situaciones personales y ofrecieron una respuesta a la altura de su tiempo en la batalla tenaz contra la COVID-19.

Allí estuvo Ernesto Ramírez, el especialista de Medicina General Integral del hospital militar, integrante de aquel primer contingente de la Brigada Henry Reeve que llegó a Italia, cuando era el epicentro de la pandemia, y aunque se perdió los primeros pasos y las primeras palabras de su hijo, siente que esa ausencia se compensa con el agradecimiento de sus pacientes italianos y el cariño de Cuba toda que lo recibió como un héroe.

Hablaron y expusieron Josefina y Maricel, con mil anécdotas para cuidarse y educar durante jornadas de pesquisas por barrios y comunidades santiagueras; Yordano, el líder de los instructores de arte, aquel ejército de médicos del alma que se desdoblaron en agricultores, mensajeros, sin dejar de montar exposiciones de dibujos en portales y ventanas, para reconocer a los médicos.

Estuvieron la pionera Yeni, activa, entre teleclases y el cuidado de sus abuelos; los dirigentes de la FEEM, devenidos baluartes en la organización de las colas; María Elena, la epidemióloga, crecida en el estudio y la rigurosa aplicación de los protocolos; los oficiales del Minint, inmensos en la defensa del orden y el cuidado de la población, y muchos, muchos otros, orgullo de los nuevos.

A todos, desde la experiencia del participante directo, el mandatario cubano les pidió apoyo para evitar que haya un relajamiento en la nueva normalidad que nos lleve al rebrote, y les transmitió el reconocimiento.

Cuando uno ve la manera en que ha actuado nuestra juventud, la manera en que una vez más hace suyas las batallas fundamentales de la Revolución, uno se siente orgulloso y seguro, significó.

 

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