Un libro publicado hace algunos días en La Habana —sobre diferentes formas abreviadas que ayudan a comunicarse en inglés a los profesionales en general y a los estudiosos de la ciencia y la tecnología en particular— ha de convertirse pronto en una obligada consulta cotidiana.
Es el Diccionario General de Abreviaciones Comunicativas (General Dictionary of Communicative Abbreviations), hecho por la Editorial Universitaria Félix Varela, obra de un cubano residente en la Isla: Rogelio Augusto Letusé La O, profesor de la Facultad de Lenguas Extranjeras de la Universidad de La Habana.
El texto contiene miles de abreviaturas, acortamientos, acrónimos, términos del argot, contracciones, modificadores libres, compuestos sincopados, afijos eliminados y palabras «telescopios» que se han convertido ya en una de las tendencias principales del idioma inglés actual en las ciencias informáticas y las computadoras.
El diccionario, con más de 300 páginas, recoge además formas abreviadas estadounidenses y británicas, locuciones y formas abreviativas frecuentes, escritas y orales.
Según el autor, la obra persigue proveer a los profesionales de una compilación amplia y lo más actualizada posible de diferentes tipos de abreviaciones en las diversas etapas del inglés como idioma internacional.
Igualmente, ha querido demostrar hasta qué punto las abreviaciones han influido en la formación de palabras en esta lengua, así como suministrar información sucinta y precisa sobre aspectos etimológicos que caracterizan dichas voces.
Asimismo, brinda oraciones y frases de fuentes originales y variadas y evidencia cuán útiles y prácticas son en el lenguaje científico y tecnológico de hoy.
«La especialidad que estudia estos fenómenos es la braquigrafía, que registra la alta cifra de formas abreviadas que están engrosando y engrosarán el idioma», refiere Letusé La O.
Dice que completó y actualizó en 2015 su investigación, iniciada en 1997 y concluida en 2015, con el criterio de no incluir términos que no sean acortamientos.
Sostiene que su libro posee una referencia útil para los hablantes y estudiosos del inglés como segunda lengua que trabajan en publicaciones digitales y en libros de papel.
«Mi diccionario ayudará también a entender mejor y a realizar un acercamiento más práctico, exacto y moderno al vocabulario de muchos países anglófonos como, por ejemplo, Australia y Sudáfrica», asegura.
Recalca que las abreviaciones comunicativas en formas estándares ya están muy relacionadas con la filología, la medicina, la biología, y las ciencias informáticas y computacionales.