Especialistas cubanos prevén incrementar la producción de biodiesel a partir de la planta Jatropha curcas, iniciativa que avanza sin competir con la alimentación humana y animal, destacó este viernes la agencia Prensa Latina.
De acuerdo con el investigador Jesús Suárez, se trata de utilizar en la producción de energía plantas oleaginosas no comestibles por humanos ni animales.
«Se decidió que las plantaciones no sean monocultivos -como es tradicional- sino asociadas con cultivos alimenticios, en aras de producir energía y alimentos de forma integrada», explicó.
Actualmente, funciona en la oriental provincia de Guantánamo una planta destinada al aprovechamiento de la Jatropha curcas, mientras que está en fase de pruebas otra en Cabaiguán, en el central territorio de Sancti Spíritus.
Según la televisión nacional, existe la intención de levantar otras tres instalaciones para biodiesel en diversas partes de la geografía cubana.
En julio pasado, durante una sesión del Parlamento, diputados de la Comisión de Energía y Medio Ambiente defendieron la iniciativa, por considerarla menos contaminante.
El propósito es producir combustible ecológico en sintonía con la política del país de no competir con la producción de alimentos, explicó entonces a PL Héctor Amigo, presidente de esa Comisión.
Cuba dispone en la actualidad de unas 110 hectáreas de Jatropha curcas, de la cual se recolectan sus frutos para extraer el aceite posteriormente sometido a un proceso industrial para obtener biodiesel.