Activistas portan carteles sobre los Cinco cerca de la embajada de EE.UU. en Awkar Beirut. Autor: Getty Images Publicado: 21/09/2017 | 04:53 pm
PINAR DEL RÍO.— «No estamos conformes. Los Cinco merecen la libertad, pues nadie, por luchar por la vida, merece estar en una cárcel», declaró aquí Olga Salanueva, esposa de René González, a los pocos minutos de conocerse la resentencia a 30 años de prisión de Ramón Labañino.
Olga se encontraba en el teatro Milanés invitada a la celebración provincial por el Día del Economista, porque tres de los cinco antiterroristas cubanos son miembros de honor de la Asociación Nacional de Economistas de Cuba (ANEC): Ramón Labañino, Fernando González y Gerardo Hernández.
Fue un momento muy emotivo cuando compartió la noticia con las decenas de pinareños pertenecientes a esta rama que se encontraban en la velada, y a quienes dijo: «Hoy ustedes celebran el Día del Economista en una provincia duramente castigada por los huracanes, la cual resurge con su trabajo. Vamos a honrar a estos hombres que están en la cárcel. Esta es la única forma de arrancar poco a poco a la supuesta justicia norteamericana estas grandes condenas, y rebajar números con el apoyo de la solidaridad internacional y del conocimiento de este caso.
«Obama, el presidente norteamericano, tiene la facultad hoy mismo de conmutar la pena, retirar los cargos y poner en libertad a los cinco antiterroristas, pero todos sabemos que esta no será una iniciativa de ninguna administración norteamericana, que durante más de 50 años han tenido una actitud hostil hacia Cuba», precisó.
Ahora comienza una nueva etapa, porque poco a poco se han ido acabando todos los eslabones judiciales. Nos queda Gerardo Hernández, con dos cadenas perpetuas y 15 años, a cuyo caso tenemos que buscarle una solución política entre todos, y trataremos de llevarlo nuevamente a la Corte para presentar nuevas pruebas de la inocencia de los cargos que se le imputan, y que no pudieron ser probados ni en el primer juicio, el cual fue verdaderamente ganado por los Cinco, pero finalmente llevado a injustas condenas, subrayó Olga.
Tuvo sentidas palabras para el resto de los familiares, como Mirtha, la madre de Antonio, quien con sus casi 80 años se llena de coraje para decir que tiene que cuidarse, pues la resentencia de su hijo fue de 22 años. Similares palabras de reconocimiento tuvo para Magali Llort, madre de Fernando, con sus más de 70 años.
«Sabemos que los Cinco no son las únicas víctimas del terrorismo contra Cuba. Ahí están los familiares de los jóvenes que murieron cuando explotó el avión cubano en el aire. Ellos ni siquiera pudieron ver la lucha contra la justicia norteamericana. Ahí están el padre de Fabio di Celmo y tantos otros. Muchos hijos de esta tierra hubieran hecho lo mismo que los Cinco y no existe ninguna causa de arrepentimiento», enfatizó.