En la Mesa Redonda Informativa, dedicada a la nueva Ley de Seguridad Social, se informó acerca de las modificaciones introducidas al proyecto original, a partir de su debate por los trabajadores y diputados
La nueva Ley de Seguridad Social cumple con el precepto de atender a toda la sociedad; pero es necesario elevar la productividad y eficiencia del trabajo para mantener el sistema que respalda los beneficios a los trabajadores.
En el programa de la Mesa Redonda Informativa, dedicado a esa legislación y su puesta en práctica, también se informó de las modificaciones introducidas al proyecto original, luego de ser sometido a la discusión de los trabajadores en sus secciones sindicales y de los diputados a la Asamblea Nacional.
María Beatriz Enríquez Charles, viceministra de Trabajo y Seguridad Social, informó que con esta ley se perfecciona el sistema de protección ciudadana, al tener en cuenta una serie de elementos y complejidades laborales no existentes años atrás.
Enríquez Charles señaló que la discusión con los diputados y en los colectivos obreros permitió introducir una serie de modificaciones al proyecto de Ley, cuya aplicación atravesará por un período de siete años.
Entre las propuestas acogidas se encuentra la de ampliar a 15 años el tiempo para examinar los máximos salarios devengados en un lustro para calcular la jubilación. La propuesta inicial fijaba ese tiempo en diez años.
Otra variación en los debates sindicales fue el derecho de los jubilados a percibir más de una pensión. Por su parte, los retirados, con 60 años las mujeres y 65 los hombres, podrán reincorporarse al trabajo en el mismo perfil pero en cargos diferentes y recibir además de las entradas económicas por la pensión, los ingresos por la labor que realicen.
Según informó Francisco Travieso Damas, asesor del Ministro del Trabajo y Seguridad Social, hoy, con autorización, 39 000 jubilados simultanean su pensión y los ingresos del puesto laboral. De esa cifra, el 19 por ciento son obreros agropecuarios.
También los beneficios de pensión a los jóvenes, huérfanos de ambos padres se extiende más allá del límite de 17 años fijado en la ley anterior, y contemplará el pago durante su tiempo de estudios.
Como un aspecto de la nueva legislación, la Viceministra señaló la inclusión en los beneficios de la Seguridad Social a los ciudadanos que laboran tierras en usufructo, lo que hoy solo ocurre con los trabajadores en los cultivos de tabaco, café y cacao.
Francisco Travieso Damas explicó que la Ley, la cual fija en 60 años la edad de jubilación de las mujeres y en 65 lade los hombres, se aplicará de forma gradual con el propósito de afectar lo menos posible a los trabajadores cercanos al retiro según lo dispuesto en la Ley 24.
En la Mesa Redonda se conoció que otras propuestas hechas por los obreros se examinaron aunque no fueron incluidas, pues su aplicación conllevaría costos muy por encima de las posibilidades reales del país.
La directora del Instituto de Seguridad Social, Martha Elena Feitó Cabrera, apuntó que la base del sistema de seguridad social de los trabajadores es el empleo, por lo que es muy necesario elevar los niveles de eficiencia y productividad.
Expresó que este sistema es muy costoso y sus gastos pueden aumentar, a partir de la tendencia al envejecimiento de la población iniciado a finales de la década de 1970, debido, entre otros factores, al incremento de la expectativa de vida de los cubanos, que es hoy de 77,79 años.
Según trascendió durante la Mesa Redonda, en los debates en los colectivos sindicales se reiteró la necesidad de mejorar las condiciones laborales, examinar el pago por el trabajo real desempeñado y tomar medidas con las personas desvinculadas de cualquier oficio.