SANCTI SPÍRITUS.— En respaldo a la Proclama del Comandante en Jefe Fidel Castro, los trinitarios conmemorarán este domingo el aniversario 47 de la victoria contra la conspiración trujillista del 13 de agosto de 1959.
Después de la peregrinación desde la sede del Partido Municipal hasta el aeropuerto Alberto Delgado Delgado, donde se desarrollará el acto, se depositará una ofrenda floral ante el obelisco a la memoria de los mártires caídos en cumplimiento de su deber con la Patria.
La recordación de aquel suceso, reafirmará el apoyo al General de Ejército Raúl Castro Ruz, así como también la disposición irrenunciable de nuestro pueblo a defender las conquistas del Socialismo.
La conspiración creció en Santo Domingo, cuando el dictador dominicano Rafael Leónidas Trujillo intentó recuperar la confianza de la administración yanqui por medio de Cuba, apoyando a quienes intentaban destruir por la fuerza de las armas el proyecto social cubano, que solo contaba con poco más de ocho meses.
La Agencia Central de Inteligencia, ricos siquitrillados y antiguos militares se complotaron en un plan que incluía la toma de Trinidad y su aeropuerto, la sublevación de guarniciones del Ejército Rebelde y el bombardeo de La Habana y Santiago de Cuba, entre otras acciones.
En la tarde del 12 de agosto de 1959 Fidel llega a Trinidad con Camilo Cienfuegos, Celia Sánchez Manduley y otros oficiales, para echar por tierra el intento de derrocar la Revolución.
Al siguiente día, Fidel esperó la segunda incursión de un avión C-46 trujillista con cargamento bélico y decide poner fin allí a la conjura. Celebraba en plena línea ofensiva sus 33 años.
El hecho desarticuló momentáneamente a la organización contrarrevolucionaria La Rosa Blanca y entonces muchos de sus integrantes se refugiaron en las lomas para desde allí seguir asediando a la naciente Revolución.
Comenzaría así el capítulo del bandidismo en la antigua provincia de Las Villas, suceso que puso a prueba una vez más la inteligencia, sabiduría y las dotes de Fidel como estratega militar y como el líder que siempre ha sido.
Ante las cámaras de la Televisión Cubana, aquel 14 de agosto, Fidel, dado a la verdad, brindó al pueblo cada detalle de lo acontecido.