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PLACETAS, Villa Clara.— Alrededor de mil kilómetros de vías férreas de la Línea Central y secundarias se acaban de inspeccionar en el país para comprobar su estado técnico, a fin de garantizar la seguridad del transporte de pasajeros y el trasiego de mercancías.
Trabajadores de la Empresa de Soldar Carriles realizaron esa labor desde enero hasta junio último como parte de las medidas para prevenir accidentes.
La inspección abarcó una parte de la Línea Central que enlaza a La Habana con Santiago de Cuba, y a otras secundarias como las de Santa Clara-Nuevitas; La Habana-Pinar del Río, y la del poblado de Martí, en Camagüey, hasta San Luis, en Santiago de Cuba, precisó Eduardo Hernández, comercial de la Empresa de Soldar Carriles de este municipio villaclareño.
El chequeo técnico, visual y ultrasónico, permite detectar fisuras o desgates del carril, daños en las traviesas y fijaciones, por citar ejemplos.
Según Lino Fernández, director de producción de la entidad citada, los daños más comunes detectados son los que no comprometen de inmediato el trasiego de trenes.
Destacó que de descubrirse algún problema que ponga en peligro la seguridad de la transportación se actúa de inmediato. Además, cada una de las averías encontradas en los diferentes tramos se comunica a la Empresa de Vías, Obras y Construcción, encargada de la reparación.
En la actualidad revisan también la Línea Central en el tramo correspondiente a Holguín y en la de Morón a Esmeralda.
La entidad inició también la revitalización de vías férreas con la sustitución de tramos, labor que ya ejecutaron en 5,4 kilómetros en el trayecto entre Piedrecitas y Florida, en Camagüey.
