La tecla del duende
Aún vibrantes los ecos del pasado mundial futbolístico, el ocurrente Fernan MM, de lleno ahora en la narración deportiva, nos remite esta simpática misiva...
«Querida (Di) María:
«¡Mira que Llorís cuando leí tu mensaje! Me puse Rojo y lo tuve Guardado, pero esta mañana lo Piqué, porque mi Musa no puede hablarme así. A mí que soy El Neny, con todo lo que te Kanté, y aún así no quisiste tirarme El Kaabi. Te regalé varios Ramos de flores, del más caro Mercado, Iniesta gestión fue suficiente.
»Recordé todo desde el inicio, cuando te conocí por Hazard. Me brindaste un café con Chicharito que estaba Dybala. Mira que me lo dijo mi madre: búscate una mujer que Silva. ¿Y Khedira tu madre, que fue tan buena conmigo? Ahora estoy en baja, pero cuando Dzyuba, me voy a recuperar de estos vientos de Quaresma a toda Costa.
«En definitiva, tú eres una Salah, con esas piernas tan Rakitic, a ti nada más se te ocurre enseñar la Muslera, como hace Cristiano. Ya no tienes el rostro Lozano y estás Cavani tu propia tumba. Soy yo el que quiere Courtois contigo. O como dicen los guapos, no te James un Kane conmigo.
Atentamente, un ruso enamorado».
Como daba besos lentos duraban más sus amores.
Escribir es que le dejen a uno llorar y reír a solas.
Las flores que no huelen son flores mudas.
El mar solo ve viajar: él no ha viajado nunca.
Ramón Gómez de la Serna