Frente al espejo
«Comparto con el periodista todo lo que dice (Rápido, furioso, entretenido y sin mareos, Joel del Río, 1ro. de mayo). Es verdad que hay películas para entretener y otras para pensar, y cada una tiene sus características. Por supuesto, esta filmación trae bastante polémica, pues es la primera vez que Hollywood filma abiertamente una película en nuestro país, y claro, hay que aprovechar estas oportunidades pues es entrada de tecnología, ingresos, publicidad para Cuba, aunque muchos detractores hablan de competencias de carros, drogas, etc., que son cosas prohibidas. En fin, hay que abrirse al mundo». (Rodin)
«Estimado Joel, no tengo, ni por asomo, tu conocimiento cinematográfico, y sí me gusta mucho ese tipo de filmes para entretenerme, pero coincido contigo en todo lo que dices. Es bien cierto, ahora La Habana se deslumbra con esa megaproducción, como sé que ellos también se sentirán deslumbrados con la ciudad. Creo que se ha establecido un precedente, que debe ser aprovechado por el beneficio económico que puede generar. El consumismo es imparable, amigo, pero por suerte aún tenemos gente como tú, que nos mantiene con los ojos abiertos. Saludos». (Nesty Brasil)
«A mí me gustan las películas de entretenimiento, y Rápido y furioso no es la excepción, pero coincido con el periodista cuando escribe que no podemos dejar que nos deslumbren con tanta parafernalia. Debemos disfrutar sin ingenuidades, porque una cosa es cierta: una manera muy fácil de infiltrar patrones culturales en nuestra juventud, para beneficio de las grandes empresas corporativas capitalistas, es a través del despliegue de una imponente puesta en escena de filmes como este, donde se invita a muchos ingenuos a incursionar en el consumo de hábitos que muchas veces son ajenos a nuestros valores» (Ibns).