Frente al espejo
«Justo después de releer su artículo Autobombo (Rufo Caballero, 9 de enero) pensé satisfecho: “¿Cuántos Rufos hacen falta para acabar con la mala facturación de algunas de nuestras propuestas televisivas? No sé, pero hacen faltan Rufos, pero hace falta Rufo”. Lo felicito no más.
«La crítica a la televisión debe ser mayor y en caliente, no cuando las puestas expiren. No debe criticarse solo el producto nacional: hay que hacerlo también con las propuestas foráneas. No vi ningún comentario crítico acerca del seriado argentino Montaña rusa, un culebrón maltratado rodado en el espacio de Aventuras (una especie en peligro de extinción); y sufro al no ver que otros programas reciban críticas...». (Alexeys González Díaz)
«Con interés se lee Martí buscó siempre el lado claro del corazón (Alina Perera Robbio, domingo 27 de enero). Al entrevistado, Dr. Pedro Pablo Rodríguez, debemos leal agradecimiento los martianos por muchas razones.
«Una afirmación en la entrevista me motiva a escribir: el juicio sobre Carmen Zayas Bazán. Aquella no era una mujer miserable, como muchos la pintan. De haberlo sido, no hubiera sido escogida por Martí como esposa y madre para su hijo.
«Si el sentimiento patrio —como explicara Martí— es vencer el egoísmo personal, Carmen, como la recordaba de manera veraz y elegante Gonzalo de Quesada y Aróstegui, “era racionalmente egoísta”. Mujer virtuosa, no logró lo que su coterránea Amalia Simoni, similar incluso en estatus social: elevarse, y no doblegarse, ante el patriotismo. La falta de patriotismo en Carmen fue la causa fundamental de la infelicidad conyugal. Notorio es destacar que dos mujeres que amó Martí tenían una especial filiación patriótica: María García Granados (“la frente que más he amado en mi vida”), primogénita de un presidente guatemalteco secundado siempre por su esposa en la lucha política; y Carmen Miyares, viuda de Mantilla, la abnegada compañera de vida de Martí en Nueva York, fiel poseedora de la confianza del Delegado del Partido Revolucionario Cubano en los años finales de su vida, y que por ostentar “el placer del sacrificio” en mucho se parecía a Doña Leonor Pérez, la que le otorgó su amistad. El hecho de discrepar no merma ni en un ápice la admiración que le profeso al entrevistado». (Profesor Jorge Juan Lozano Ros)
«Nunca había escrito a un periódico pero es de mi interés hacer llegar mi conformidad con el escrito publicado el 12 de enero en la página Sexo Sentido, titulado ¿Prefieres el mango verde o maduro? (Víctor Manuel Velázquez, estudiante de Psicología, y Mileyda Menéndez Dávila). Hasta el momento en que leí el artículo tenía un concepto bastante pequeño acerca de la madurez. Erróneamente pensaba que esta hacía su aparición en determinada edad de la juventud. Muchas veces he escuchado a madres quejarse de las actitudes inmaduras de sus hijos, principalmente del sexo masculino. Creo que debe tomarse este punto para futuras publicaciones sobre el tema... Gracias a los conocimientos generales que ustedes brindan, jóvenes como yo aprendemos a aprender». (Yasser Fernández Perera, estudiante de Geografía, Universidad de La Habana)
Lamentablemente, en una información sobre la situación en Chad, publicada en la página 7 de la edición dominical del 3 de febrero, nos referimos a la ciudad de Addis Abeba como capital de Egipto, cuando realmente lo es de Etiopía. Agradecemos el interés de todos nuestros lectores que llamaron o escribieron.