Acuse de recibo
«Pocas veces me visitan las pesadillas, confiesa Dairelys Rojas, sicóloga de Consolación del Sur, en Pinar del Río. Pero la noche del 14 de abril se hicieron eco angustias, miedos y temores ante la noticia de un inminente viaje. Algo contradictorio cuando el mensaje de esos días era quedarse en casa. Pero los motivos estaban fuera de cualquier discusión: tenía la misión de partir a la Comunidad Camilo Cienfuegos, afectada por la COVID-19, a brindar mis servicios.
«Se materializaba la realidad construida desde el imaginario social del pueblo consolareño. Y ello para nada era tranquilizador. Me vi de pronto en un lugar detenido, incoloro. Parecía deshabitado, reinaba el silencio. Y en medio de ese reino comencé mi labor.
«Con el transcurso de los días me comparaba con un caballero medieval en el sentido de la armadura. Mientras ellos vestían metal plateado, yo llevaba indumentaria textil verde. Y debí sustituir la espada por un trozo de palo para poder enfrentar mi miedo a los perros.
«Imagíneme blandiendo la rústica e improvisada espada hacia un lado y otro para detener el ataque de esos animales cuando llegaba a los hogares a pesquisar. Pero la sangre nunca llegaba al río. Las voces de mando de sus amos salían a intervenir.
«La pesquisa como actividad rectora permitía tocar simbólicamente los miedos y deseos más profundos de los entrevistados. Ver sus rostros de aburrimiento, impotencia, angustia; unos llenos de incertidumbre, otros de culpa. Y en función de esos semblantes, principalmente de los niños, se le dio vida a un espacio interactivo a través de la radiobase. No existían distancias de dos metros ni aislamiento. Y mi voz se alzaba cada mañana con el objetivo de cambiar esos rostros aun en medio de circunstancias tan adversas.
«Era un regocijo ver las caritas de los más pequeños asomadas a los balcones, aguardando el inicio del programa. Mis mensajes y convocatorias no se hacían esperar. Llovían dibujos, cartas, poemas, décimas, composiciones. Todo un derroche de creatividad e imaginación de la comunidad.
«Cada jornada era un desafío para estar a la altura de tan sublimes demandas. Y en busca de satisfacerlas, las mañanas eran cortas y algunas noches largas. Pero valía la pena. En uno de aquellos dibujos se mostró el avance de mi trabajo: en el centro de un corazón, alguien escribió la palabra Psicología.
«Fueron 19 intensos días fuera de casa y lejos de la familia. Pero ser testigo de tantas muestras de calidad humana, cariño, agradecimiento y disciplina, y por qué no, risas y lágrimas de felicidad, ha sido una de las experiencias más hermosas de mi vida.
«No sabe esa comunidad cómo atesoro aquellas vivencias y lo mucho aportado a mi vida profesional y personal. Haber atravesado junto con ellos parte del período de cuarentena me permitió elaborar un concepto propio que, lejos de ser un producto teórico, emerge de mis vivencias y constituye parte esencial de las páginas de mi vida en tiempos de coronavirus», concluye.
En nombre de los vecinos de los bloques B y C del reparto Antonio Maceo de la ciudad de Santiago de Cuba, Deisy Despaigne Sánchez y Doralicia Brossar Linares agradecen y elogian la actuación ejemplar de la directora provincial de Acueductos y Alcantarillado, Ludmila Rodríguez Barroso, ante la situación crítica que atravesaban con el agua los pobladores de 12 edificios, que incluían niños, ancianos, gestantes, enfermos e incluso algunos postrados.
La afectación, refieren, fue por la rotura de la turbina. Y Ludmila actuó con rapidez. Inmediatamente se personó allí, «mostrando su altruismo y sensibilidad humana». Intercambió con los vecinos presentes y expresó: «Hoy haremos todas las gestiones posibles y su problema será resuelto. Espérenme que muy pronto regresaré».
Así fue. Una hora después apareció acompañada del Vicegobernador de la provincia, quien también sostuvo intercambio y dio muestra de su gran preocupación por el pueblo. Y apareció la esperada turbina, incluyendo la del bloque C, que presentaba también una situación similar.
«Dirigentes así son los que necesita la Revolución, que saben llevar a la práctica el significado de pensar y actuar como país, dando respuesta a lo expresado por nuestro Presidente de la República», concluyen.