Este lunes 14 y martes 15 sesionará en La Habana un taller para compartir herramientas comunitarias que faciliten la sensibilización y el cambio de actitudes en pos de la atención a las necesidades diferenciadas de las personas en un contexto de desastres
Con el propósito de ilustrar cómo herramientas comunitarias diseñadas y aplicadas con un enfoque inclusivo y de protección, pueden marcar la diferencia en la prevención y respuesta ante desastres desde el nivel local, se celebrará este lunes 14 y mañana 15 de octubre en La Habana el taller Enlazados en el Caribe por la inclusión y la protección para la reducción de los desastres.
En nota llegada a la redacción de Juventud Rebelde se precisa que ete evento forma parte de las acciones del proyecto binacional Cuba/República Dominicana Aprendiendo de las experiencias del huracán Irma y María: Integración de la protección y la inclusión en la Reducción del Riesgo de Desastre (RRD) en el Caribe, y pretende convertirse en un espacio de sensibilización y cambio de actitudes en pos de la atención a las necesidades diferenciadas de las personas en un contexto de desastres.
Los participantes del taller podrán conocer los principios y acciones que promueven la Defensa Civil y la Protección Civil de Cuba, Haití y República Dominicana con respecto a la Gestión Inclusiva del Riesgo de Desastres (GIRD), mostrar las pautas desarrolladas por actores e instituciones locales en los tres países, así como mostrar los avances y experiencias en la implementación de Sistemas de Alerta Temprana Inclusivos.
Los desastres generados por peligros naturales muestran una tendencia al alza, debido al incremento de fenómenos climáticos extremos, lo cual unido a las condiciones de vulnerabilidad imperantes aún en ciudades, comunidades y zonas rurales, propicia que existan niveles de riesgos que solo podrán ser disminuidos si se aumentan las capacidades locales de resiliencia.
En este sentido, el Sistema de la Defensa Civil Cubana y otras organizaciones que trabajan el tema de la reducción de desastres en el país, toman en cuenta las vulnerabilidades y también las capacidades inherentes a la edad (niñas, niños, ancianos y ancianas), al género (mujeres y hombres) y a las personas con discapacidad, garantizando la participación de estos grupos en la planificación e implementación de las medidas para prevenir y atenuar los desastres.
El proyecto Aprendiendo de Irma y María, liderado en Cuba por el Centro de Servicios Ambientales de Matanzas (CSAM), del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma), con el apoyo del consorcio OXFAM y Humanity & Inclusion y el financiamiento de la Dirección general de protección civil y operaciones de ayuda humanitaria de la Unión (ECHO), es uno de los que ha contribuido a introducir herramientas adaptadas al contexto de cada país, que tributan al concepto de Reducción inclusiva del Riesgo de Desastre (RiRD).