Jóvenes que combaten la COVID-19 en Cuba. Autor: Cortesía de la FEU de Cuba Publicado: 22/04/2021 | 11:33 pm
Que el 85 por ciento de los medicamentos utilizados en Cuba para el tratamiento contra el SARS-CoV-2 sean de fabricación nacional y que la comunidad científica cubana haya podido desarrollar cinco candidatos vacunales a la par es un logro de impacto mundial, no solo por lo que representa desde el punto de vista sanitario, sino porque se ha realizado en medio del recrudecimiento del bloqueo impuesto por Estados Unidos a nuestro país.
Así aseveró Eduardo Martínez Díaz, presidente del Grupo Empresarial BioCubaFarma, en la conferencia de prensa efectuada este miércoles con la presencia de representantes de esa entidad, del Instituto Finlay de Vacunas y del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB), para brindar una actualización sobre el impacto de los productos y proyectos de la biotecnología cubana en el enfrentamiento a la COVID-19 en el país.
Martínez Díaz especificó las potencialidades de los inmunomodulares como la Biomodulina-T, los antivirales, los antinflamatorios, los diagnósticos serológicos y el diagnóstico molecular, que completan una lista de 27 proyectos desarrollados en el país para enfrentar la Covid-19.
La doctora Marta Ayala Ávila, directora general del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB), y el doctor Vicente Vérez Bencomo, director general del Instituto Finlay de Vacunas, ratificaron que los eventos adversos más frecuentes asociados a los candidatos vacunales cubanos Abdala y Soberana 02, ponen en evidencia que se han ubicado en un 95 por ciento en eventos leves y un cinco por ciento en eventos moderados; y estos últimos se resuelven por lo general sin medicación.
Los logros hasta ahora registrados en el enfrentamiento a la COVID-19 a partir del aporte de la biotecnología cubana deben ser doblemente valorados, destacó el Presidente de BioCubaFarma, si tenemos en cuenta que han sido muchas las negativas recibidas durante este tiempo por parte de bancos que nos gestionaban créditos documentarios y de proveedores que evitan comercializar con el Grupo cubano debido a la prohibición que tienen de operar con productos que tengan un diez por ciento de sus componentes norteamericano, aclaró.
«Esa es la razón por la que tenemos dificultades para la producción de varios medicamentos, y también de los candidatos vacunales (Soberana 01, Soberana 02 y Soberana Plus, del Instituto Finlay de Vacunas; así como Mambisa y Abdala, del CIGB), porque aunque esas empresas deseen continuar los negocios con Cuba, temen ser multadas. Los ciclos productivos se ven afectados además por el desabastecimiento de recursos y materias primas, y Estados Unidos no nos permite cumplir con el objetivo de salvar vidas».
Martínez Díaz comentó que FarmaCuba importa más de 10 000 items de materias primas, materiales de envase, diagnosticadores, reactivos, equipamientos y piezas de repuesto. «Se importan de diferentes orígenes, pero la mayor cantidad proviene de cinco países. Cuenta con 499 suministradores, el 51 por ciento son intermediarios, en su gran mayoría para poder burlar el bloqueo».