HOLGUÍN.— Los indicadores productivos de todas las unidades pertenecientes a la Industria Alimentaria aquí muestran similares ritmos de entrega y eficiencia que los registrados antes del paso del huracán Sandy, evidencia de la ágil recuperación conseguida, principalmente por la dedicación de los colectivos laborales.
Lo anterior fue destacado por Rafael Rodríguez Ávila, coordinador provincial del Ministerio de la Industria Alimentaria, quien puntualizó que las mayores afectaciones tuvieron lugar en las cubiertas y falso techos de instalaciones de la Pesca, y en centros para el procesamiento de productos cárnicos, conservas de vegetales y frutas, lácteos y de bebidas y refrescos, entre otros con destino a la población y al consumo social, fundamentalmente.
Rodríguez Ávila insistió en reconocer que los daños se afrontaron de inmediato por los mismos obreros en cada lugar, como revelación no solo del sentido de pertenencia, sino de sacrificio y de capacidad organizativa, pues centenares de ellos sufrieron afectaciones de diversa índole en sus viviendas y no por ello dejaron de trabajar.
Entre esos colectivos sobresalió el esfuerzo de los trabajadores del Molino de maíz Comandante Daniel, de Antilla; la fábrica de conservas Turquino, de la ciudad de Holguín; y el del establecimiento lácteo de Levisa, en Mayarí, donde se comenzó a producir apenas recogieron los escombros y se contó con el estado higiénico-sanitario necesario en los locales.
Precisó que según las condiciones específicas en cada lugar se adoptaron medidas organizativas y alternativas para no incumplir con los compromisos productivos.
Entre las variantes que emplearon estuvo el traslado de materias primas hacia las unidades en mejores condiciones, como fue el caso del Combinado Cárnico Felipe Fuentes, de Holguín, que asumió por varios días las producciones del establecimiento cárnico de Banes.
El también director de la Empresa pesquera holguinera señaló que esa actividad igualmente se logró recuperar en pocos días y se mantienen buenos ritmos en la captura, tanto en la plataforma marítima como en la acuicultura, por los colectivos emplazados en municipios como Mayarí, Rafael Freyre, Gibara y Holguín.
En cuanto al acopio de leche, el directivo informó que la recaudación con destino a la Industria Láctea recuperó los indicadores promedio que se venían alcanzando antes de Sandy, estimados en más de 53 000 litros diarios, necesarios para la elaboración de productos esenciales como la leche fluida.
Reiteró que ninguna entidad de la Alimenticia ha renunciado a sus planes de producción para el año, y ejemplificó con el caso del acopio de leche que, de 11,5 millones de litros planificados para la etapa, exhibe un real de 12,8.