Cada vez es más frecuente ver a los cubanos por las calles portando algún teléfono celular y hablando por este, aunque brevemente, lo cual derrumba poco a poco mitos y prejuicios hacia una tecnología que ha revolucionado el mundo de las telecomunicaciones.
Casi medio millón de cubanos disfrutan ya de este servicio, incluyendo en esta cifra a quienes lo han adquirido en moneda libremente convertible, los asignados por interés social, así como los Teléfonos Fijos Alternativos (TFA) por sus siglas, llamados popularmente los teléfonos de 400 minutos.
No obstante, y a pesar de recientes rebajas, el servicio de telefonía celular tiene todavía altos precios, aunque existe la firme intención de acercar cada vez más esta utilidad a la población haciéndola más accesible en todos los sentidos, según afirman los directivos de la Vicepresidencia de Servicios Móviles de la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba, ETECSA.
Aun así, la telefonía celular deberá todavía enfrentar en Cuba retos tecnológicos, económicos y en el orden específico de las telecomunicaciones, pues —por ejemplo— hoy la misma red inalámbrica debe soportar tanto las llamadas que se hacen desde celulares activados en moneda libremente convertible como de los TFA, los que más consumen.
También deben seguir trabajando en reordenar u organizar temas como el de los servicios posventa, la venta de terminales, o sea teléfonos, más baratos, así como en lo relacionado con la seguridad y estabilidad de las comunicaciones por esta vía y la prevención y detección de delitos relacionados con esta tecnología.
De estas y otras cuestiones relacionadas con el servicio de telefonía celular en Cuba conversó JR con varios directivos encargados del tema, en aras de despejar dudas y aumentar la cultura sobre un tema del cual todavía no se conoce lo suficiente.
Servicios socialesAl cierre del año 2008 se registraban en Cuba un total de 479 861 líneas celulares activas, incluyendo en ellas tanto las comercializadas en moneda libremente convertible como las asignadas por interés social, entre ellas las de los Teléfonos Fijos Alternativos o TFA, ubicados en casas particulares y también en centros agentes, que prestan servicios a toda la comunidad funcionando como una especie de teléfonos públicos.
«Este servicio ha permitido llevar la telefonía a lugares, a los que, por ser muy intrincados, nunca se hubiera podido llegar de otro modo, o a aquellos que por la densidad telefónica o la necesidad de fuertes inversiones tampoco hubieran tenido acceso de inmediato al teléfono», explica Máximo Lafuente Vázquez, vicepresidente de Servicios Móviles de ETECSA.
«Hoy el mayor volumen de tráfico en la red celular se produce a través de los TFA y los centros agentes, que tienen asignados 3 000 minutos mensuales, por lo cual a pesar de que estos «celulares fijos» y los asignados por interés social significan apenas el 30 por ciento de las líneas, todos los servicios sociales ocupan casi el 80 por ciento del tráfico», asegura el directivo.
Esto significa en la práctica que la gran mayoría del tráfico de telefonía celular es subsidiado por el Estado gracias a los ingresos que se obtienen por los móviles que funcionan en moneda libremente convertible, y los ingresos provenientes del roaming o pagos recibidos por ETECSA al utilizar los visitantes extranjeros sus celulares en Cuba.
A su vez, la telefonía cubana también enfrenta los retos provocados por la disparidad de precios entre los servicios celulares y los de la telefonía fija, los cuales en su gran mayoría se cobran en moneda nacional a precios muy bajos.
«Por eso, y para evitar la congestión del espacio radioeléctrico, no solo tenemos que hacer un proceso constante de inversiones para aumentar la cobertura, sino que en estos momentos nos vemos obligados a limitar el tiempo de los TFA solo a 400 minutos, si bien la solución ideal sería convertir esas líneas en fijas, lo cual se irá haciendo paulatinamente en dependencia de los recursos disponibles», explica el Vicepresidente de Servicios Móviles de ETECSA.
«La solución es ir migrando paulatinamente los TFA a la red de telefonía fija, así como buscar otras alternativas, y de hecho este año se ha decidido instalar por interés social unos 10 000», enfatiza el directivo.
No solo sucede esto, sino que también ha sido necesario mantener el cobro de las llamadas entrantes a los móviles, dada la disparidad en la cantidad de teléfonos, los precios y el volumen de llamadas entre esta modalidad y la telefonía fija.
«Si no fuera así, las llamadas entrantes desde los teléfonos fijos serían de infinita duración, y por ende se saturaría el espacio radioeléctrico para el servicio de telefonía celular», explica Jorge Luis Valdés, director comercial de la Vicepresidencia de Servicios Móviles de ETECSA.
«Actualmente el cobro por llamada que se recibe tanto desde un móvil como de un fijo es de 0,46 centavos CUC, el de la realizada hacia otro celular de 0,50 centavos y hacia un fijo de 0,60 centavos. Y en el caso de las llamadas recibidas desde el extranjero son totalmente gratuitas.
«Los mensajes de texto o SMS, que pueden llegar hasta los 160 caracteres, se cobran a 0,16 la emisión, no así el recibo que es totalmente gratuito. Igualmente hemos implementado recientemente el envío y recepción de MMS o de contenidos gráficos, que se cobran a 0,60 centavos, servicio cuya activación debe solicitarse previamente sin costo alguno en las oficinas comerciales y, a su vez, en dependencia de las características del terminal, configurarlo para que pueda acceder a esa utilidad».
GSM universalHasta enero de este año la cobertura de la red de telefonía celular alcanzaba el 67,33 por ciento del territorio cubano y el 75,80 por ciento de la población, aunque quedan en el país 33 municipios sin cobertura, de los cuales 12 la alcanzarán este año, según está previsto en el proceso inversionista de ETECSA.
Esta cobertura se ha implementado con tecnología GSM, la de mayor extensión en el mundo, mientras que la TDMA se ha ido eliminado paulatinamente, cambiando gratuitamente la línea a quienes poseen este servicio, proceso que debe concluir en los próximos meses.
No obstante, uno de los elementos importantes a tener en cuenta para acceder a un buen servicio es el tipo de terminal, que en nuestro país debe ser capaz de transmitir y recibir en la banda de los 900 Megahertz.
Esto explica el por qué muchas personas que vienen a Cuba con teléfonos comprados en el extranjero no pueden usarlos, ya que no transmiten en esa frecuencia o no son multibandas, asegura Eldis Cobo, asesor del Vicepresidente de Servicios Móviles de ETECSA.
Esto sucede —reflexiona— tanto porque no existe ninguna regulación que limite el tipo de teléfono celular que se entra al país, como fundamentalmente por el alto precio de los que actualmente se ofertan en nuestras tiendas, los cuales oscilan entre los 70 y más de 300 CUC, según las características y prestaciones del equipo.
«En el caso de Cuba, los teléfonos también se encarecen al no poder, hasta el momento y a causa del bloqueo norteamericano, adquirirlos de fabricantes internacionales de reconocido prestigio como Nokia, Motorola o Samsung, y tener que comprarlos a través de terceros.
«De cualquier forma, en estos momentos están en ejecución proyectos para acercar los precios de los teléfonos cada vez más a la población, vendiendo equipos baratos, en aras de continuar extendiendo este servicio», afirma el Vicepresidente.
Todo esto, reflexionan los directivos de telefonía móvil, permitirá a su vez mejorar la venta de accesorios para los teléfonos, una de las problemáticas mayores en la comercialización de estos equipos, dada la diversidad tan grande de dispositivos y marcas existentes hoy en el país; y a su vez posibilitará ofrecer contenidos y software para los móviles, algo en lo cual se trabaja ya de conjunto con DESOFT, CITMATEL y la Universidad de las Ciencias Informáticas (UCI).
La unificación al menos parcial del equipamiento influirá además en la disponibilidad de piezas y tecnología para la reparación de los aparatos, «pues con el tema de los servicios posventa hemos tenido dificultades dado el espectacular crecimiento en la cantidad de teléfonos circulando y su diversidad, por lo que en estos momentos se está analizando la apertura de nuevos talleres y la preparación de más personal especializado».
Incautos y pillos atrapadosPasar de apenas unos 40 000 celulares activos hace unos años a casi medio millón en la actualidad ha traído aparejados múltiples fenómenos en todos los sentidos, tanto en la necesidad de las inversiones constantes en la infraestructura que se requiere para mejorar la calidad del servicio, como en la congestión en determinadas fechas por sobresaturación del tráfico o la proliferación de un mercado negro de celulares y servicios asociados a este.
Uno de los problemas más frecuentes en este sentido es el de quienes llegan al país con teléfonos comprados en el extranjero y que están «bloqueados» ya que estaban siendo utilizados por otras operadoras extranjeras, y deben decodificarlos antes de ponerlos en servicio.
«Esto lo hacemos nosotros mismos a un costo de 5,00 CUC en un taller habilitado al efecto, si bien es verdad que hemos tenido muchas dificultades y actualmente estamos trabajando para disminuir el tiempo de solución de cualquier problema, que se ha elevado a 21 días, cuando estaba previsto que fueran siete», reconoce Jorge Luis Valdés, director comercial de la Vicepresidencia de Servicios Móviles de ETECSA.
«Con el tema de los servicios posventa hemos tenido dificultades, dado el espectacular crecimiento en la cantidad de teléfonos circulando, por lo cual en estos momentos se está analizando la apertura de nuevos talleres y la preparación de más personal especializado, en aras de que la decodificación no esté en manos de elementos particulares, como sucede en muchos casos».
No obstante, y para evitar que la gente sea engañada, los funcionarios de ETECSA aseguran que es importante aclarar que una cosa es la decodificación del teléfono y otra el desbloqueo de este, el cual constituye un delito que actualmente se está atacando, ya que muchas veces está relacionado con el robo de los aparatos.
Precisamente los delitos relacionados con la telefonía móvil, ya sean por desconocimiento o por intención de eludir tarifas o timar a incautos, se han disparado en la misma proporción que la cantidad de líneas en activo.
A su vez, ETECSA se ha fortalecido y pertrechado tecnológicamente y de capital humano para combatir estas manifestaciones, muchas de las cuales se han reducido o desaparecido gracias a su oportuno enfrentamiento.
En este sentido se ubican, por ejemplo, la compra de aparatos fuera de las oficinas de ETECSA, los cuales muchas veces son robados y, por ende, al ser denunciados pasan a engrosar una lista negra que hace posible la detección de su uso.
«Cuando una persona utiliza uno de estos aparatos sustraídos y activa una línea en ellos, si bien puede efectuar la llamada inmediatamente nuestros programas lo detectan y esa línea es bloqueada», explica Fe Rodríguez Luis, jefa del Departamento de Calidad y Aseguramiento de Ingresos de la Vicepresidencia de Servicios Móviles.
«En muchos casos cuando la persona va a ver por qué le bloquearon su línea es que se entera de que el aparato que compró en el mercado negro, era robado, y por tanto pierde ese dinero invertido.
«Algo similar sucede cuando intenta utilizar la tarjeta SIM de activación de la línea en otro teléfono, lo cual también detectamos y bloqueamos ese servicio. Por eso es tan importante que ante la sustracción de un teléfono móvil sea inmediatamente denunciado en nuestras oficinas», subraya la directiva.
Para ello, además de acudir a las oficinas de ETECSA con su número de contrato y numeración de cliente, también puede llamar al Centro de Atención Telefónica a través del número 05 264 2266, proporcionar estos datos y posteriormente pasar por la oficina comercial en persona a ratificar la denuncia.
«Generalmente las personas vienen a quejarse porque le bloquearon la línea sin saber que poseen un teléfono robado, pues desconocen que además del número telefónico cada aparato tiene una serie propia, la cual se registra cuando se hace o recibe una llamada.
«Aunque lo mejor es asegurarse de la correcta procedencia de cualquier equipo que se vaya a adquirir, el cliente también puede saber el número de serie de su teléfono discando *#06#. Esta numeración no puede cambiarse en los teléfonos, ya que de hacerlo y ser detectado constituye un delito penado por la ley y competería a la policía encargarse del caso».
Otros delitos que se han sucedido, son la compra de tarjetas de recarga fuera de las oficinas, las cuales han sido robadas y por ende su numeración está bloqueada, o la llamada «recarga simultánea».
En este caso dos personas poseedoras de móviles han intentado, con una misma tarjeta y discando el código de recarga a la vez, que le asignen dinero a los dos teléfonos con un solo pago.
«Esa manifestación que se incrementó en los últimos tiempos también se ha combatido y reducido significativamente, ya que a las personas que incurren en ella se les bloquea la línea y los dos deben pagar nuevamente la recarga», asevera la Jefa del Departamento de Calidad y Aseguramiento de Ingresos.
Al respecto, en el contrato de adquisición de la línea de telefonía móvil se estipula, en la cláusula diez, que: «el servicio quedará bloqueado a solicitud del cliente o por interés de ETECSA cuando exista un uso inadecuado del mismo, se utilice la Tarjeta SIM en equipos terminales reportados como sustraídos o extraviados, y cuando existan irregularidades fraudulentas tanto en el uso del SERVICIO como en la recarga de este».
Otras irregularidades también detectadas han sido intentar desviar llamadas recibidas en un teléfono fijo desde el extranjero pasándolas a un móvil, en la creencia de que así no se la cobrarán, lo cual no es real pues en este caso sí se cobra la llamada del fijo al celular.
De igual forma, de no recargar su línea antes del último día de la fecha de vencimiento, esta se bloquea. «Si esto sucede, debe hacerse una recarga en los próximos 30 días, pues de lo contrario la línea se perdería definitivamente», subraya la funcionaria de ETECSA.
«Es verdad que se han dado intentos de fraudes en el tema de la telefonía celular, pero también es cierto que se trata de medios digitales, donde todo lo que se hace queda registrado, y tarde o temprano el infractor es atrapado, así que nadie puede creer que va a quedar impune, pues todas estas irregularidades pueden ser causantes de supresión del servicio», acentúa Máximo Lafuente Vázquez, vicepresidente de Servicios Móviles de ETECSA.
Aumento vertiginosoLa telefonía celular terrestre en Cuba no precisa de conexión satelital como muchos creen, salvo que se haga o reciba una llamada desde un teléfono celular ubicado en el extranjero. Tampoco el servicio es infalible, pues depende de muchos factores, entre ellos el nivel de cobertura, el tipo de equipo y la ocupación del espacio radioeléctrico.
El aumento vertiginoso de la cantidad de líneas en servicio, tanto por las inversiones sociales como por su contratación en moneda libremente convertible implicó un crecimiento de 133 000 líneas en 2008; y que solo en diciembre, a partir de la rebaja a la mitad del precio de activación, que es hoy de 60,00 CUC, se contrataran unas 40 000 líneas.
Aunque la cantidad de líneas en moneda libremente convertible ha aumentado, no ha sucedido lo mismo con el consumo promedio en ellas, que actualmente oscila entre los 19 y 20 CUC mensuales, o sea unos 36-40 minutos en dependencia del tipo de llamada.
«Eso evidencia la diferencia abismal con respecto a los servicios de interés social que son subsidiados por el Estado, y ratifica el papel que ha jugado la telefonía celular en la expansión de las telecomunicaciones en Cuba», enfatiza Máximo Lafuente Vázquez.
«Con ella también se garantizan los recursos necesarios para nuevas inversiones destinadas a ampliar la cobertura y calidad de la telefonía móvil, pero también de la fija, en aras de elevar la disponibilidad de las telecomunicaciones. Estas inversiones, así como otros proyectos que actualmente se estudian, nos permitirán además seguir acercando la telefonía móvil cada vez a más personas».
—¿Eso significa que podemos esperar nuevas rebajas de precios?
—Más que hablar de rebajas en específico es importante que se sepa que el Estado cubano tiene la firme intención de continuar expandiendo la telefonía móvil y convertirla paulatinamente, y en dependencia de los recursos, en un servicio accesible para la mayoría de la población.
«En esta intención se enmarcan tanto los proyectos de rebajas como la venta en el futuro de celulares menos costosos, siempre y cuando las condiciones técnicas y económicas permitan respaldarlos, pues la telefonía celular es ante todo un servicio para mejorar la calidad de vida de la población cubana».
De historia y tecnología
La telefonía móvil o celular se conoce desde mediados del siglo XX, aunque no fue hasta la década del 70 que poco a poco comenzó a extenderse, primeramente a precios muy altos y con equipos rudimentarios.
El primer prototipo de teléfono móvil comercializado a gran escala fue el diseñado por el ingeniero Rudy Krolopp, de la compañía Motorola, en 1983. Este teléfono pesaba 740 gramos, casi un kilogramo, y tenía un valor de 4 000 dólares.
Desde entonces la constante investigación en este campo ha propiciado el desarrollo de baterías más pequeñas y de mayor duración, pantallas más nítidas y de colores, la incorporación de software más amigable y multiplicidad de formatos de teléfonos y de funciones agregadas a este, lo cual ha hecho que muchos crean que se trata del dispositivo del siglo XXI.
Actualmente un teléfono móvil de última generación permite no solo realizar llamadas, sino reproducir música y videos, tomar fotos y pequeñas películas, transmitir lo grabado, así como consultar internet, enviar y recibir correos electrónicos, mensajes de texto y gráficos, contienen prestaciones como agenda personal y calculadora, juegos electrónicos e incluso ya se puede ver por ellos televisión digital.
Datos reflejados por la Enciclopedia Virtual Wikipedia atestiguan que Nokia es actualmente el mayor fabricante en el mundo de teléfonos móviles, con una cuota de mercado global de aproximadamente 39,1 por ciento, seguida de Samsung con un 14,4 por ciento, Motorola 10,2; LG Mobile 8, y Sony Ericsson con un 7,5 por ciento.
El funcionamiento de los teléfonos celulares, móviles o no, difiere un tanto de la telefonía convencional, ya que se enlazan con el resto de las líneas fijas y a su vez entre sí a través de radiobases o antenas que ofrecen una determinada cobertura territorial y que pueden procesar cierta cantidad de llamadas simultáneas.
Estas radiobases se conectan vía inalámbrica o por cables con las centrales telefónicas que procesan las llamadas de los móviles y a su vez con la red de telefonía fija, incluyendo los enlaces internacionales, permitiendo la intercomunicación entre todos los equipos, tanto dentro de un país como hacia el extranjero.