A.T.: Soy un hombre joven y quisiera una relación estable, incluso ser padre; pero no logro que la erección me dure hasta la penetración de la pareja. Sirvo solo para sexo oral y juegos, luego decae y no responde. El urólogo me dijo que debe ser sicológico, pero no entiendo por qué si no soy tímido y me gustan las mujeres con quienes probé. Ahora prefiero buscar una eventual para el desahogo. ¿Qué debo hacer? ¿Hay alguna prueba de estrés o trauma o algo así? A veces ni la pastilla esa me hace nada.
Es preciso ver qué más sucede contigo, que te identificas como quien sirve «solo para sexo oral y juegos». Tu cuerpo se resiste a penetrar a una mujer. ¿Qué podría decir esta imposibilidad de penetrar? ¿Qué placer se pierde cuan-
do dejas de disfrutar lo oral y los juegos? ¿Qué relación encontrarías entre ese deseo de estabilidad y paternidad, con esta resistencia de tu cuerpo a penetrar en eso? Es mejor una eventual para el desahogo: ¿qué te ahoga?
Como ya has constatado, la dificultad para sostener la erección no significa que no te guste la mujer, ni que tengas problemas del carácter. Si el urólogo diagnostica que no tienes problemas de salud, significa que tu cuerpo está capacitado para que la erección dure. Muchas veces las pastillas no funcionan, porque no actúan contra la verdadera causa de la dificultad eréctil.
Debes acudir a una consulta multidisciplinaria, especializada en estos problemas o a un sicólogo. No es tan simple como encontrar una prueba diagnóstica pa-
ra un tratamiento infalible. Ya tu cuerpo se resiste, algo en ti no quiere penetrar lo femenino. Ahora es recomendable comprender qué dice ese síntoma de ti y tu relación con las mujeres, cuando pudiendo penetrar tu pene prefiere decaer sin responder.