Senderos de la vida y la prolífica obra humanista de uno de los padres del pensamiento cubano
Félix Varela, Sacerdote, maestro, escritor, filósofo y político, considerado el primero que enseñó a los cubanos a pensar en el patriotismo, Félix Varela nació en La Habana, el 20 de noviembre de 1788. Estudió filosofía y teología en el Seminario de San Carlos y San Ambrosio y en la Universidad de La Habana. En 1811, ya sacerdote, ocupó la cátedra de Filosofía de la primera de esas instituciones.
Con 24 años de edad, el Padre Varela es nombrado, por el Obispo Espada, profesor de Filosofía, Física y Ética en el Seminario. Allí prepara el primer laboratorio de Física y Química que tiene el país: cajas galvánicas, tubos de ensayo, máquinas neumáticas, sistema planetario móvil y otros instrumentos para la enseñanza de las ciencias mediante la experimentación.
Diputado a Cortes de Cádiz en 1821, en representación de Cuba, el Padre Varela defendió el derecho a la autonomía de los territorios americanos, propuso la abolición de la esclavitud en la Isla y la modernización de la enseñanza. El retorno español al absolutismo monárquico lo condenó a muerte. Huyó de España y se estableció en Estados Unidos. Desde allí se consagró a fomentar el independentismo en los cubanos. Junto a notables pensadores criollos publicó el Mensajero Semanal (1821-1831), destinado a educar y preparar a la población para empeños futuros.
Murió en San Agustín, Florida, Estados Unidos, el 25 de febrero de 1853. Después de instaurada la República, sus restos fueron trasladados a La Habana, y están colocados en el Aula Magna de la Universidad de La Habana.
Desde 1981 el Gobierno de la República de Cuba creó la Orden Félix Varela, la más alta distinción otorgada a cubanos y extranjeros, así como a colectivos culturales, en reconomiento a aportes extraordinarios realizados a favor de los valores imperecederos de la cultura nacional y universal.