Te contamos que se trata de uno de nuestros granos favoritos, muy especialmente preparados en potaje, y que en nuestra Isla suele acompañarse con arroz blanco, aunque en algunas casas de familia se comía acompañado de la deliciosa harina de maíz. Muchos al consumirlo solo, como potaje, gustan de comerlo con pan
Es viernes y por tanto Cocina con JR te trae una nueva propuesta, una que forma parte sin dudas de la dieta y la cocina cubana. Te invitamos a hacer entonces una leguminosa nativa de América y que recibe diversos nombres en dependencia del país o la región. Se trata nada más y nada menos que los «Frijoles negros», a los cuales también se les conoce como judías, habichuelas, caraotas, porotos… negros.
Te contamos que se trata de uno de nuestros granos favoritos, muy especialmente preparados en potaje, y que en nuestra Isla suele acompañarse con arroz blanco, aunque en algunas casas de familia se comía acompañado de la deliciosa harina de maíz. Muchos al consumirlo solo, como potaje, gustan de comerlo con pan.
Generalmente al potaje de frijoles negros no se le agregan, a diferencia de otros potajes, ni carnes ni viandas, excepto en las provinciales orientales, aunque puede haber otras excepciones según tradiciones familiares. Algunos le adicionan vino tinto o vino seco, azúcar, vinagre, cebolla picada salteada en aceite al final de la cocción.
El puré de frijoles negros obtenido tras colar el potaje toma el nombre de «puré africano». Los «frijoles dormidos» son una variante del potaje de frijoles negros, bien cuajado, muy espeso. Algunos prefieren consumir los frijoles al otro día de cocinados pues resultan más espesos.
Sin más acá te dejamos los ingredientes.
Elaboración: