El recogimiento espiritual y los llamados de paz que caracterizan la celebración de Ramadán han sido perturbados por la violencia desatada por el ejército israelí. Autor: Reuters Publicado: 11/03/2024 | 10:47 pm
GAZA/JERUSALEN, marzo 11— El pueblo de la Franja de Gaza recibió el sagrado mes del Ramadán con hambruna, desplazamiento, matanzas, asedio y genocidio, enfatizó en un comunicado este domingo la oficina de medios del gobierno en esa región palestina, donde lo ocurrido en estos cinco meses desde el 7 de octubre es un terrible crimen de lesa humanidadm, cometido por el ejército de ocupación israelí y bendecido por la administración estadounidense, en medio del silencio de la comunidad internacional, denunció el texto.
Durante ese tiempo, las fuerzas ocupantes atacaron más de 500 mezquitas; 220 de ellas fueron demolidas, y 290 destruidas de manera parcial, pero no son aptas para la oración, lamentó el mensaje, citado por Al Mayeeden.
A la vez, Middle East Eye reportaba que las fuerzas israelíes golpearon e impidieron que los fieles musulmanes entraran al recinto de la mezquita de Al-Aqsa en Jerusalén la primera noche del mes sagrado del Ramadán.
En imágenes de vídeo compartidas en línea, se ve a agentes de policía israelíes armados golpeando a palestinos en las calles de la Ciudad Vieja, mientras caminaban hacia el lugar sagrado para asistir a las oraciones del taraweeh. Las oraciones especiales tienen lugar todas las noches del mes sagrado del Ramadán y suelen atraer a decenas de miles de musulmanes que rezan en congregación, dijo Middle East Eye.
Según los medios locales, los soldados israelíes establecieron múltiples puestos de control alrededor de la Ciudad Vieja en la Jerusalén Este ocupada, bloqueando carreteras y obstruyendo el acceso de la gente al lugar. Testigos presenciales dijeron que la policía israelí sólo permitió la entrada al lugar a algunos hombres y mujeres mayores de 40 años.
El gobierno israelí emitió una declaración el 5 de marzo diciendo que no restringiría a los fieles palestinos durante el Ramadán. Los testigos dijeron que las fuerzas israelíes detuvieron y registraron los bolsos de hombres y mujeres jóvenes en los callejones de la Ciudad Vieja.
Una mujer dijo a los medios locales que «el número de palestinos a quienes se les impidió entrar a al-Aqsa fue mayor que el número de fieles que pudieron entrar y realizar oraciones taraweeh» y agregó que «las fuerzas de ocupación han impedido incluso cualquier reunión de palestinos u oraciones en las zonas circundantes».
La prevención de la entrada de fieles a Al Aqsa se produce al mismo tiempo que los palestinos en Gaza se vieron obligados a orar al aire libre entre las ruinas, tras más de cinco meses de bombardeos israelíes y la destrucción total de casi todas las mezquitas de Gaza, donde hasta el día 157 del total asedio han sido asesinados 31 112 palestinos y heridos 72 760, señaló Palestine Chronicle, cuyo corresponsal describió así el rezo:
«Oh Dios, por favor ponga fin a esta guerra», dijo el imán mientras los fieles repetían Ameen. «Oh Alá, por favor concédenos la victoria, bendice a nuestros mártires y ayuda a nuestras familias». «Ameen», corearon todos.
La ONU también ha anunciado que el 80 por ciento de la Franja es ahora inhabitable, mientras que el hambre generalizada se ha apoderado de la mayor parte de Gaza. Al menos 27 personas han muerto a causa del hambre y la inanición desde el inicio de la guerra. «Ahora vivimos en condiciones peores que las de la Nakba»}", dijo Diab al-Zaza a Middle East Eye, refiriéndose al período en el que los palestinos fueron asesinados o expulsados de sus hogares cuando nació el Estado de Israel. «En el momento de la Nakba había menos gente y el país estaba abierto, pero ahora estamos asediados por todos lados», añadió.
En cuanto al comunicado mencionado, también responsabilizó a la administración estadounidense y a la comunidad internacional, además de la ocupación israelí, por un crimen de genocidio que avergüenza a la humanidad, sobre todo esta guerra de hambre, la extinción de familias completas y los crímenes intencionales contra civiles, en especial niños y mujeres.
El comunicado llamó a todos los países del mundo libre a presionar a la entidad sionista y detener la abierta limpieza étnica contra el pueblo palestino, la cual acumula más de 110 000 víctimas, entre mártires, heridos, desaparecidos y detenidos.
Asimismo, solicitó ayuda efectiva para detener la hambruna de inmediato, antes de que sea demasiado tarde para la población gazatí.
En cuanto a la ayuda humanitaria, la oficina de medios del gobierno en Gaza pidió la liberación de cientos de miles de toneladas acumuladas al otro lado del cruce de Rafah y su entrega inmediata al honorable pueblo a través de otros cruces terrestres.