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La agonía a la que ha sido sometido el pueblo palestino es uno de los mayores crímenes cometidos por el invasor israelí. Autor: AFP Publicado: 19/12/2023 | 12:21 am
Tras 73 días de la matanza de civiles indefensos en Gaza, con más de 19 400 muertos y 52 000 heridos, Israel utiliza el hambre, la falta de agua y las enfermedades como armas de exterminio masivo adicionales a sus bombardeos aéreos y terrestres.
Las operaciones militares del Estado sionista prosiguen con intensidad, ante los insistentes llamados a un inmediato cese del fuego de la opinión pública mundial y entes humanitarios.
Al respecto, el alto representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, apuntó este lunes la «espantosa falta de distinción» en la operación militar israelí. «En Gaza han muerto demasiados civiles, como han señalado, entre otros, los ministros de Asuntos Exteriores de Francia, Alemania y Reino Unido», afirmó Borrell.
Incluso, dentro de Israel se multiplican las marchas y manifestaciones frente a la residencia del primer ministro, Benjamín Netanyahu, en reclamo de un acuerdo de intercambio de prisioneros con el Movimiento de Resistencia Palestina Hamás, que permita la liberación de 128 militares y civiles israelíes.
Entretanto, trascendió que, en Varsovia, el director de la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos (CIA) Bill Burns, sostiene contactos con el primer ministro qatarí, Mohammed bin Abdulrahman Al Thani, y el jefe de la agencia de espionaje israelí Mossad para negociar un posible nuevo acuerdo de cese del fuego e intercambio de prisioneros.
El portavoz del Ministerio de Salud en Gaza, Ashraf Cudra, informó este lunes que «durante las últimas horas, la ocupación israelí cometió 16 masacres en áreas de la Franja de Gaza, con saldo de 151 personas asesinadas y 313 heridas».
Israel se ha encarnizado con los periodistas, lo que arroja un saldo de al menos 92 trabajadores de la prensa muertos. Este fin de semana la reportera palestina Haneen Ali Al-Qashtan fue asesinada, junto a miembros de su familia, durante un bombardeo israelí en el campo de Nuseirat, ubicado en el centro de la Franja.
Por otra parte, la cadena Al Jazeera decidió remitir a la Corte Penal Internacional el caso del asesinato por las tropas de ocupación de su camarógrafo Samer Abu Daqqa, quien fue ultimado el viernes por drones israelíes mientras reportaba el bombardeo a una escuela de Naciones Unidas en la que se refugiaban palestinos desplazados. Después de herirlo gravemente, los ocupantes impidieron durante horas que le llegara asistencia médica.
Otra denuncia de resonancia mundial por la pérdida de civiles indefensos la emitió el papa Francisco quien deploró la muerte el sábado de dos mujeres en una parroquia católica en Gaza. «Una madre y su hija murieron y otros fueron heridos por los disparos de francotiradores», afirmó Francisco al final de la plegaria del Ángelus.
El trágico balance de la operación militar israelí desde el 7 de octubre incluye 310 miembros del personal médico fallecidos y 93 están detenidos. Además, 102 ambulancias y 138 centros sanitarios fueron destruidos por los bombardeos, en tanto 22 hospitales y 52 centros de atención médica quedaron fuera de servicio.
El Ministerio de Salud de Gaza registró 350 000 casos de enfermedades infecciosas y reclamó ayuda para más de 700 000 niños, 50 000 mujeres embarazadas y 350 000 pacientes crónicos, incluidos 1 100 con insuficiencia renal.
