Las manifestaciones de violencia del Gobierno israelí provocan el repudio de la comunidad internacional. Autor: Ejército de Israel Publicado: 13/11/2023 | 08:40 pm
GAZA, noviembre 13.— Al cumplirse la quinta semana de ataques contra el territorio de la Franja de Gaza, el Ministerio de Salud palestino elevó a 11 360 la cifra de muertos, incluyendo 4 609 niños y 3 100 mujeres, mientras prosiguen los bombardeos contra el hospital de Al-Shifa, el principal del enclave, donde durante las últimas horas fallecieron tres enfermeras y 15 pacientes perdieron la vida por la falta de electricidad.
Por otra parte, seis bebés prematuros fallecieron al apagarse las incubadoras, mientras que otros 39 y pacientes con problemas renales, dependientes diálisis, corren riesgo de muerte por la falta de electricidad.
El portavoz del Ministerio de Salud de Gaza, Ashraf al-Qudra, informó que allí siguen atrapados alrededor de 650 pacientes y un gran número de personas. El hospital carece de agua, comida y combustible, bloqueados por el ente sionista desde el 8 de octubre pasado.
La Media Luna Roja Palestina dijo que tanques y militares israelíes se hallan desplegados en todas las direcciones en torno a Al-Shifa y también cercan al hospital Al-Quds, que dejó de funcionar el domingo por falta de combustible y de electricidad.
Mientras francotiradores y drones disparan contra cualquier persona que detecten en sus inmediaciones.
Los combates se concentran en la ciudad de Gaza en especial alrededor de algunos hospitales que el ejército israelí señala como escondite de material militar de Hamás.
El director de los hospitales de la Franja de Gaza, Mohammed Zaqout, señaló que miles de pacientes se encuentran sin atención tras las «evacuaciones forzosas» de los hospitales pediátricos Al Nasser y Al Rantisi.
Según la ONU, 20 de los 36 hospitales de la Franja de Gaza están «fuera de servicio» ante la falta de suministros.
El jefe de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Ghebreyesus, llamó a un inmediato alto al fuego y a evitar que los hospitales se conviertan en escenario de muerte.
Los ataques aéreos israelíes también mataron al menos a 31 personas en el campo de refugiados de Jabalia, en el norte de Gaza, según la agencia de noticias Wafa. Otros ataques aéreos han alcanzado zonas residenciales del campo de refugiados de Nuseirat y Deir el-Balah, ambos en el centro de Gaza.
Entretanto, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, reiteró el domingo que el ejército del Estado sionista es la única fuerza que puede controlar Gaza después de la guerra.
Al parecer Netanyahu intenta restar valor a su pérdida de prestigio, tras el ataque al interior de Israel por parte de militantes de la Resistencia Palestina y comienza a hablar un lenguaje de vencedor, aunque Hamás sigue haciendo blanco con sus cohetes en Tel Aviv.
El premier israelí hace planes para una ocupación militar a largo plazo y rechazó la idea de que la Autoridad Palestina (AP), que administra algunas áreas de Cisjordania, se apodere de Gaza.
En realidad, esa estrategia entraña el riesgo de una larga guerra de degaste contra los efectivos de Hamás, sumidos en la clandestinidad y buena parte de los palestinos sobrevivientes de la agresión que, sin dudas, se sumarán a la Resistencia.
Por su parte, Al Jazeera dio a conocer que más de 30 organizaciones religiosas y de la sociedad civil con sede en Estados Unidos, incluidas Amnistía Internacional Estados Unidos, la Iglesia Evangélica Luterana en Estados Unidos, Oxfam América y el Proyecto sobre la Democracia en Oriente Medio, han firmado una carta abierta dirigida al secretario de Defensa, Lloyd Austin, instando a la administración Biden a no transferir proyectiles de 155 mm a Israel para su uso en Gaza, porque son armas que no pueden discriminar entre personal civil y militar, tienen un alto radio de acción y de error, violando el Derecho Internacional Humanitario.