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Un futuro de solidaridad y cooperación

Durante la reunión ministerial preparatoria de la Cumbre del Futuro, a celebrarse en 2024, el canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, reafirmó la necesidad de garantizar el reconocimiento del derecho al desarrollo para los países del sur global 

Autor:

Juventud Rebelde

Importantes demandas resonaron este jueves en la reunión ministerial preparatoria de la Cumbre del Futuro, cita convocada para 2024. Al abrir las intervenciones, el titular de la ONU, António Guterres, llamó a redoblar esfuerzos para garantizar un Pacto del Futuro ambicioso y transformador, aunque advirtió que «el tiempo no está de nuestro lado».

«Las apuestas son altas; el Pacto del Futuro ayudará a determinar si afrontamos los graves desafíos de hoy y de mañana, o si continuamos por el camino del colapso social, financiero, político y ambiental», advirtió.

En la reunión, el canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, reafirmó la necesidad de garantizar el reconocimiento del derecho al desarrollo para los países del sur global en la ruta hacia la Cumbre del Futuro e insistió en el derecho de los Estados agrupados en el G77 y China a vivir sin hambre ni pobreza, como una prioridad.

El camino hacia ese noble propósito está indiscutiblemente relacionado con el cambio del actual orden internacional injusto y excluyente, enfatizó al recordar los efectos de los desbalances existentes que se multiplican en los países castigados por la aplicación arbitraria de medidas coercitivas unilaterales, las cuales afectan a un importante grupo de naciones del bloque.

«Cualquiera que sea el resultado de la Cumbre del Futuro, esta tendrá que exhortar a los Estados a que se abstengan de promulgar y aplicar cualquier medida económica, financiera y unilateral no acorde con el derecho internacional y la Carta (de la ONU) que impida el desarrollo pleno económico y social, en particular, de los países en desarrollo», agregó.

Advirtió en que el Pacto del Futuro debe establecerse mediante negociaciones intergubernamentales abiertas, transparentes e inclusivas, teniendo en cuenta las opiniones de todos los Estados miembros y grupos de países.

«Exhortamos a todas las delegaciones a que participen en todas las negociaciones de manera constructiva y a que se eviten prácticas desleales, promovidas por algunos Estados miembros que pretenden imponer a los demás una especie de veto en relación con importantes temas». Sobre algunos de estos tópicos no se acepta ni siquiera negociar, dijo, aunque deben ser incluidos en el Pacto como parte de las responsabilidades.

La Cumbre deberá proporcionar una plataforma de aceleración para la reforma del sistema multilateral, con el fin de avanzar hacia un mundo más justo,
equitativo, unido y sostenible, que se encamine hacia el desarrollo y la prosperidad de todos los países de conformidad con la Carta de las Naciones Unidas, subrayó.

En tal sentido, el ministro de Exteriores de Nepal, Narayan Prakash Saud, quien usó de la palabra en calidad de Presidente de los Países Menos Avanzados (PMA), estimó que ese encuentro debe dar pasos decisivos para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y lograr el compromiso de aprovechar el poder de la ciencia, la tecnología y la información a través de un Pacto Digital Mundial, así como trazar una Declaración de Futuras Generaciones que asegure el desarrollo de los jóvenes. Además se pronunció por la adopción de medidas especiales de apoyo a los PMA, y asegurarles el alivio de la deuda externa.

Por su parte, Amery Browne, canciller de Trinidad y Tobago y para los Asuntos de la Comunidad del Caribe (Caricom), afirmó que será por medio de la solidaridad global que podrán alcanzarse soluciones globales, identificó al multilateralismo como el único vehículo a través del cual podemos cumplir nuestros objetivos comunes. Manifestó esperar que esa cita consolide una mayor sensibilidad ante las  necesidades de los países en desarrollo como los Pequeños Estados Insulares.

En las sesiones también intervino la Unión Europea en la persona de su Alto Representante Josep Borrell, quien dijo que «hay que dar un paso al frente» ante la crudeza que representa el peligro de que no se cumplan los ODS, y afirmó que la Unión Europea se compromete a movilizar financiación para quienes más lo necesitan.

El canciller de Nicaragua, Denis Moncada, instó a un compromiso verdadero entre los países para que la Cumbre del Futuro sirva de plataforma y aborde el cambio climático y otros temas de interés global. Añadió que ese foro deberá tomar en cuenta la reforma de la arquitectura financiera internacional.

En nombre del Grupo de Amigos en Defensa de la Carta de las Naciones Unidas intervino el canciller de Venezuela, Yván Gil, quien aseguró que no es a través de sanciones o coerciones como haremos realidad la promesa sostenida en la Carta de las Naciones Unidas.  Rechazó las medidas coercitivas unilaterales, y estimó que es una cuestión «que ya no puede ignorarse y que, por tanto, debe abordarse a fondo en un eventual Pacto del Futuro».

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