El exministro de Hacienda, Rishi Sunak, y la secretaria de Asuntos Exteriores, Liz Truss. Autor: AFP Publicado: 01/09/2022 | 08:46 pm
LONDRES, septiembre 2.— El exministro de Hacienda, Rishi Sunak, y la secretaria de Asuntos Exteriores, Liz Truss, protagonizaron este miércoles su último debate cara a cara antes de que el próximo domingo uno de los dos se convierta en el nuevo líder del Partido Conservador y asuma el cargo de jefe del Ejecutivo británico, reportó este jueves RT.
Durante la discusión organizada por la emisora de radio LBC, los candidatos respondieron a preguntas sobre cuestiones internas relacionados con el sistema fiscal, la crisis energética y el aumento del costo de vida ante una inflación no vista en décadas, al tiempo que abordaron el conflicto en Ucrania y otros temas de la agenda internacional.
Interpelada sobre si contempla o no la introducción de nuevos gravámenes si sale victoriosa en la carrera por el puesto de premier, Truss atajó: «Sí, sin nuevos impuestos».
Presionada por el moderador Nick Ferrari sobre la subida de las facturas eléctricas, la candidata aseguró que se propone «actuar sin falta sobre los costes energéticos de las empresas». Asimismo, prometió no introducir un racionamiento de energía. «Eso lo descarto», dijo.
Por su parte, Sunak, que fue partícipe de la oleada de renuncias de ministros que forzaron la salida del primer ministro, Boris Johnson, abogó por la introducción del impuesto imprevisto para compañías energéticas.
«No sé si Liz lo apoya o no, pero creo que es absolutamente lo correcto en un momento en el que las compañías energéticas están obteniendo miles de millones de libras de beneficios debido a una guerra. Eso no está bien y deberíamos gravarlas excepcionalmente y ayudar con las facturas de la gente», declaró.
Respondiendo a la misma pregunta sobre el racionamiento, una medida a la que piensan recurrir algunos países, como Francia, Sunak dejó la puerta abierta a su posible aplicación. «No hay que descartar nada, porque los retos a los que nos enfrentamos con esta crisis son importantes», explicó.
El exministro de Hacienda subrayó que muchos países europeos ahora están evaluando cómo optimizar el uso de la energía. «Eso es algo sensato que debemos hacer como país», esgrimió.
Entretanto, las pronósticos del grupo de banca de inversión Goldman Sachs apuntan a que la economía británica entrará en recesión en el cuarto trimestre de este año, a lo que se añade el riesgo de que pueda tratarse de una profunda contracción.
En concreto, se prevé la caída del PIB en cerca del uno por ciento hasta mediados de 2023. Mientras, el nivel anual de producción caerá en un 0,6 por ciento, marcando un cambio de rumbo en comparación con las previsiones de que este indicador crecería un 1,1 por ciento. Asimismo, la tasa de ahorro de los hogares británicos se hundirá por debajo de «la tasa de equilibrio», hasta llegar a un mínimo histórico del 3,5 por ciento en el segundo trimestre del 2023. En cuanto a los ingresos reales disponibles, disminuirán un 2,9 por ciento el próximo año.
Paralelamente, la aspirante señaló que de instalarse en el número 10 de Downing Street —la sede del jefe del Gobierno—, seguirá prestando a Kiev el apoyo que, dijo, necesita. En este sentido, destacó que su primera llamada telefónica internacional sería con el presidente ucraniano Volodímir Zelenski, a quien se refirió como «una inspiración».
Por otra parte, Sunak descartó la idea de ofrecerle a Johnson un puesto en el Gobierno o incluso de enviarlo como representante del país a Ucrania. «No estoy seguro de que quiera hacer ninguna de estas cosas. [...] No voy a sentarme aquí y tratar de asignar puestos de trabajo a la gente, no creo que eso sea apropiado», recalcó.
El pasado agosto, Sunak escribió una carta abierta a los ucranianos publicada por Kyiv Post con motivo del día de la independencia del país, en la que recalcó: «Sean cuales fueren los cambios que se produzcan en nuestro país, los británicos seguiremos siendo siempre su mejor aliado».
Unos 200000 tories votarán este 5 de septiembre en las elecciones que determinarán quién será el nuevo primer ministro, el cual asumirá el cargo un día después.
La parte oficial prevé un encuentro con la reina Isabel II que recibirá a Johnson y a su sucesor en la residencia real de Balmoral (Escocia). Será la primera vez en que la Reina recibirá oficialmente al nuevo jefe de Gobierno en un lugar distinto al palacio de Buckingham o el castillo de Windsor, ambos ubicados en Inglaterra.