Manolo de los Santos ha dicho que la Cumbre de Biden es ya un fracaso. Autor: @manolo_realengo/ Twitter Publicado: 04/06/2022 | 09:56 pm
A pesar de que les ha sido negado el permiso para marchar el día 10 de junio por las calles de la ciudad de Los Ángeles, la Cumbre de los Pueblos 2022, que como cada año desde 2005 se celebra de forma paralela a la mal llamada Cumbre de las Américas, se manifestará ese día.
La confirmación la ha dado Manolo de los Santos, coordinador de la cita, ante la interrogante de Juventud Rebelde. Pero la pregunta ha sido apenas la excusa del diario para extenderse en un diálogo vía whatsApp pedir al también codirector de la organización People’sForum y miembro de la Asamblea Internacional de los Pueblos, su visión acerca de esa negativa; la importancia de una cita que se celebra, opinó, «en un momento clave», así como los motivos en los cuales se asienta la decisión de realizar la marcha pese a todo, entre otros asuntos relacionados con la excluyente Cumbre de las Américas que, en su criterio y el de muchos, es ya un fracaso.
«Decidimos —y se lo hemos dicho ya al Departamento de la Policía y le hemos pedido que se lo comuniquen al Gobierno federal— que nosotros, con permiso o sin permiso, vamos a marchar en la ciudad de Los Ángeles; no solamente porque es nuestro derecho democrático, sino también porque son muchos años de lucha, y lo que venimos a expresar no son solamente quejas sino demandas, exigencias que llevan nuestros pueblos de todo el continente contra esta Cumbre excluyente», dijo en alusión a la reunión presidencial.
De los Santos detalló los pormenores de la negativa que llega después de un semestre de preparación de la Cumbre de los Pueblos y a «tres meses exactamente» de que los organizadores solicitaran el permiso de movilización en la ciudad.
«Se lo pedimos al Departamento de Policía de la ciudad de Los Ángeles y confiábamos en que el proceso democrático y legal aquí, en Estados Unidos, iba a garantizar nuestro derecho a la libre expresión.
«Llevamos meses esperando una respuesta, hasta que la semana pasada, finalmente, nos informan que el Gobierno federal y el servicio secreto aún no habían autorizado esa marcha y que, por tanto, ellos no podían darnos el permiso».
«Nosotros lo hemos denunciado», dijo el activista social, quien consideró que «esta Cumbre de las Américas, que ya tiene un carácter excluyente de los países progresistas como Cuba, Venezuela, Nicaragua, también es excluyente de los pueblos, y de la misma gente que reside en esta ciudad, que está viviendo una crisis económica y social muy fuerte.
«Encima de eso, decir que esta Cumbre de las Américas, que no es democrática para todos los países de América, tampoco es democrática para los pueblos que quieren expresar y visibilizar sus voces y sus puntos de vista, es demasiado», aseveró.
Interrogado acerca de las motivaciones centrales de esta cita de los pueblos, De los Santos opinó que mucho ha cambiado en nuestro continente desde la inicial Cumbre de los Pueblos de 2005, en Mar del Plata.
«Por un lado, vivimos un período de gran crecimiento de las fuerzas populares, de las fuerzas de izquierda; muchos gobiernos populares llegaron al poder. Pero también hemos visto un gran período de contrarrevolución, hemos visto un período de golpes, intervenciones militares, de juicios en contra de presidentes progresistas.
«O sea, el Gobierno de Estados Unidos no ha cesado de arremeter contra los procesos de izquierda y populares en nuestro continente, y creo que cuando llegamos a esta Cumbre de los Pueblos en el 2022, lo hacemos en un momento en que el Gobierno de Estados Unidos no ha dejado de mantener esa política de agresión contra América Latina y el Caribe.
«Al contrario, la ha profundizado, y lo ha hecho a pesar de que el presidente Joe Biden, en su campaña, había hablado de pasar a una nueva página en la historia de las relaciones entre la región y Estados Unidos».
Rechazo a la exclusión
El joven activista social de origen dominicano también denunció el intento de la administración Biden de dividir a los latinoamericanos; «decidir cuáles son los latinoamericanos “buenos” y cuáles son los “malos”, «basándose en cuáles son los sistemas políticos, sociales y económicos que hemos decidido llevar a cabo».
«Por eso esta Cumbre llega en un momento clave. Es una verdadera batalla de las ideas que se está dando en Los Ángeles. Y creo que hay ya un reconocimiento, incluso dentro de la misma sociedad estadounidense, de que Biden y su Cumbre han sido un fracaso, antes de empezar. Porque el consenso que ellos asumían que tenían en América Latina a su favor, no existe», consideró.
El activista social también valoró como muy importante «el rechazo masivo, no solo de otros mandatarios y jefes de Estado, yo creo que de la sociedad y los pueblos de América Latina y el Caribe», a la exclusión de Cuba, Venezuela y Nicaragua de la Cumbre de las Américas.
«Creo que eso también ha ido desmontando la idea de que Estados Unidos tenía consenso en la región y que podía seguir imponiendo sus decisiones».
«Hemos visto, inclusive, la fragmentación de ciertas alianzas de Estados Unidos en la región. Por lo tanto, considero que esta Cumbre de las Américas va a marcar un antes y un después en las relaciones de Estados Unidos y Latinoamérica.
«Tendrán que darse cuenta ya que no pueden seguir manteniendo las mismas relaciones. Que nuestros pueblos tienen el ímpetu de ser libres, de ser soberanos, de ser independientes por encima de todo, y que van a tener que surgir y fortalecerse nuestros propios frentes de integración. Y que nosotros, los pueblos que estamos dentro de Estados Unidos, que nos identificamos mucho con esas causas, queremos ser parte de ese proceso de integración».
Manolo de los Santos afirmó que, por ello, «la Cumbre de los Pueblos será un reflejo de todas las luchas que se dan en nuestro continente; de las voces de Cuba, de Venezuela, de Nicaragua, que ellos tanto han querido excluir, pero que estarán presentes, de todos modos, en Los Ángeles.
«Nuestras banderas de lucha, la batalla por la soberanía, por la independencia; la lucha por la reforma agraria, por una educación de calidad para todos; la lucha por un sistema de salud, por eliminar el “apartheid” de las vacunas (anti-COVID-19), todo eso va a estar presente en la Cumbre de los Pueblos, y no solo por parte de los panelistas de todo el continente que van a estar compartiendo con nosotros sino, también, en las luchas y la movilización política que se va a dar».
Acerca de la negativa de Washington de otorgar visas a los miembros de la delegación cubana que acudiría a la Cumbre de los Pueblos, De los Santos confesó que «para decirlo honestamente, quedamos muy molestos con la negación de las visas, precisamente cuando sabemos que el Gobierno estadounidense está invitando a figuras reaccionarias.
«Negaron la posibilidad de un diálogo con el pueblo norteamericano; le tenían miedo a la presencia de la delegación de cubanos dignos que, más allá de la política, más allá de la ideología, iban a hablar de logros concretos y materiales de sus pueblos, iban a hablar de todo lo posible que está haciendo la Revolución Cubana en estos tiempos, no solo por mejorar la calidad de vida de su propio pueblo, sino por ayudar al resto de la humanidad.
«Nos quedamos sin esa presencia en vivo, pero, de todos modos, Cuba estará presente en la Cumbre de los Pueblos; estará participando por la vía digital, y creo que por más que ellos quieran bloquear las relaciones entre pueblos, nosotros insistimos en que Cuba no es nuestro enemigo, Cuba es amigo de la humanidad, y tenemos el derecho de acompañarla y caminar junto a ella en esta gran lucha por la humanidad».
Una Cumbre por y para los pueblos
Más de 200 organizaciones, sindicatos y movimientos sociales han confirmado su asistencia a la cita, que se celebrará en la ciudad estadounidense de Los Ángeles guiada por el derrotero de Una Cumbre por y para los pueblos, los días 8, 9 y 10 de junio, «para contrarrestar la 9na. Cumbre de las Américas (…)», anuncia la convocatoria.