Justicia para los presos se pide en el letrero afuera de la Penitenciaria del Litoral. Autor: AP Publicado: 15/11/2021 | 07:18 pm
QUITO, noviembre 15.— Tras la nueva masacre el pasado viernes y sábado en la Penitenciaría del Litoral, en Guayaquil, con saldo de 68 fallecidos y 25 heridos, el presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, designó al general de división Orlando Fuel como jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, en sustitución del vicealmirante Jorge Cabrera.
Lasso sostuvo una reunión de emergencia el domingo para abordar el incidente, en la cual participaron los ministros de Gobierno y Defensa, Alexandra Vela y Luis Hernández, respectivamente, así como los principales mandos de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional.
Luego del encuentro se anunció la sustitución de Cabrera y otros mandos. Mediante nota de prensa, la Secretaría de Comunicación de la Presidencia dio a conocer, además, que el general de brigada Luis Enrique Burbano ejercerá como comandante general de la Fuerza Terrestre, responsabilidad en la que sustituye al general Fabián Fuel.
Además, Lasso aceptó la renuncia del coronel Bolívar Garzón como director del Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad (Snai), frente al cual llevaba 47 días.
Dicha cartera la asume el titular del Centro de Inteligencia Estratégica, el militar retirado Fausto Cobo, quien la desempeñó hasta finales de septiembre pasado, cuando fue designado Garzón tras otra masacre en la referida penitenciaría, con saldo de casi 120 internos asesinados.
La Penitenciaría del Litoral registró otro incidente violento el pasado 1 de noviembre, con saldo de tres internos asesinados.
Tras la masacre de septiembre, el coronel Garzón expuso ante la Asamblea Nacional que las cárceles ecuatorianas tienen un hacinamiento de casi 30 por ciento (pueden acoger a 30 169 internos, pero tenían 38 186). En ese momento faltaban 1 654 guardias de seguridad.
En esa ocasión el oficial señaló que cuatro de cada diez reos no tenía sentencia en firme (superaban los 14 800 internos en esta situación).
Además, criticó la tendencia de otorgar prisión preventiva sin fundamentos y la burocratización de trámites de libertad a unos 5 000 presos con beneficios penitenciarios.
Expertos han señalado que durante el anterior Gobierno ecuatoriano (dirigido por Lenín Moreno, 2017-2021) se abandonaron paulatinamente programas que permitían atender las causas sociales que generan la inseguridad ciudadana y la crisis carcelaria.