Base Naval de Guantánamo. Autor: AP Publicado: 05/04/2021 | 06:10 pm
Una unidad, que fue secreta, dentro del centro de detención de la ilegal base naval de EE. UU. en Guantánamo ha sido cerrada y los prisioneros trasladados a otra instalación en la propia base, dijo el domingo el ejército estadounidense, aduciendo que estaba en mal estado.
Los prisioneros en el Campo 7 fueron trasladados a una instalación adyacente a donde los otros detenidos en la base están retenidos como parte de lo que el Comando Sur de EE. UU. dijo en un comunicado que era un esfuerzo para «aumentar la eficiencia operativa y la eficacia», dijo AP.
El Comando Sur, con sede en Miami, que supervisa el centro de detención en el extremo sureste de Cuba, no dijo cuántos prisioneros fueron trasladados. Las autoridades han dicho previamente que unos 14 hombres estaban detenidos en el Campo 7. Hay 40 prisioneros en Guantánamo, agregó la agencia noticiosa.
El Comando Sur dijo que los prisioneros del Campo 7 fueron trasladados al Campo 5 «sanos y salvos y sin incidentes», pero no dijo cuándo ocurrió el traslado. El Campo 5, que estaba en gran parte vacío, está al lado del Campo 6, donde están los otros detenidos en la controvertida cárcel para «sospechosos de terrorismo».
El Campo 7 se inauguró en diciembre de 2006 para los presos que anteriormente estaban recluidos en una red de centros clandestinos de detención de la CIA, a menudo conocidos como «sitios negros», donde fueron sometidos a brutales técnicas de interrogatorio, que también fueron practicadas en la prisión estadounidense en Guantánamo.
Los militares lo ejecutaron bajo un acuerdo con la CIA, y el Comando Sur dijo que las agencias de inteligencia estaban involucradas con la transferencia.
Los militares se negaron durante mucho tiempo a reconocer la ubicación del Campo 7 en la base y nunca han permitido que los periodistas vean el interior de las instalaciones, apuntó Associated Press.
Los funcionarios habían dicho que la unidad, que nunca fue diseñada para ser permanente, tenía problemas estructurales y necesitaba ser reemplazada, pero el Pentágono retiró los planes para buscar dinero para la construcción.
Entre los detenidos en el Campo 7 se encontraban los cinco prisioneros acusados de crímenes de guerra por sus supuestas funciones de planificación y apoyo logístico para los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001.
El presidente Joe Biden ha dicho que tiene la intención de cerrar Guantánamo, pero eso requeriría la aprobación del Congreso para trasladar a algunos prisioneros a EE. UU. para ser juzgados o encarcelados.
El campo de concentración se inauguró en enero de 2002 para mantener a combatientes extranjeros sospechosos de vínculos con los talibanes o la organización terrorista al-Qaida. Durante el gobierno de Bush, 532 prisioneros fueron liberados de Guantánamo, a menudo en grandes grupos a Afganistán y Arabia Saudita.
Durante un tiempo, se produjeron críticas por parte de algunos funcionarios estadounidenses, quienes consideraban que la continua operación del centro de detención debilita la seguridad nacional al drenar los recursos, dañar las relaciones con aliados y socios clave y darles justificaciones a extremistas violentos.
Pero la mayor oposición y denuncia ha provenido de organizaciones de derechos humanos internacionales.
La administración Obama trato de cerrar el centro de detención en medio de la oposición del Congreso, que prohibió el traslado de detenidos a EE. UU. por cualquier razón, e intentó entonces el traslado de detenidos a otros países, logrando enviar poco más de una docena a Emiratos Árabes.
Sin embargo, la administración Trump detuvo esos traslados, e incluso se habló de que volverían a utilizarla para nuevas detenciones.
Según Military Times, aquellos que presionan por el cierre de la prisión ahora ven una ventana de oportunidad, esperando que la administración de Biden encuentre una manera de procesar a aquellos que pueden ser procesados y liberar al resto.
Se estima que este centro de detención para los 40 detenidos actuales, cuesta más de 445 millones de dólares por año.
Las intenciones precisas de Biden para Guantánamo siguen sin estar claras.