Lula da Silva rechaza maniobras injerencistas de la Casa Blanca contra Latinoamérica Autor: Twitter Publicado: 05/10/2019 | 12:37 pm
BRASILIA, octubre 5.- En entrevista con Russia Today, el expresidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva explicó por qué rechaza recibir el beneficio de la prisión semiabierta a cambio de una multa equivalente a 1,25 millones de dólares.
Yo no rechazo mi libertad. Si hay algo que quiero en la vida es irme a casa a vivir con mis hijos, a vivir con mi familia. Sin embargo, lo que no puedo aceptar es la tesis de que estoy a la espera de una progresión porque cometí un crimen y ya cumplí un sexto de la condena. Quiero salir de aquí con mi inocencia 100 por ciento comprobada. Quiero que aquellos que mintieron al pueblo brasileño se sometan al juicio del pueblo como me estoy sometiendo yo, subrayó Lula da Silva.
El dirigente del Partido de los Trabajadores (PT) está preso desde abril del 2018 por su presunta vinculación con el caso de corrupción conocido como Lava Jato y fue inhabilitado por la justicia para participar de las elecciones del año pasado, cuando era el candidato más popular.
Inácio Lula da Silva aclaró que «estoy desafiando a un juez que mintió en mi juicio, que era [Sergio] Moro, un procurador que mintió en la acusación, y los que dijeron mentiras en la investigación». Actualmente, el magistrado que condenó a Lula dirige el Ministerio de Justicia bajo la Administración del derechista Jair Bolsonaro.
Como no pensaron que podrían volver a lo que se hacía en el siglo XIX con los que se rebelaron en este país: ahorcar, decapitar, descuartizar… decidieron utilizar el poder judicial para transformarme en lo me que están transformando (...) Quiero defenderme, porque el culpable en este país es el que me condenó, y quiero demostrarlo, recalcó.
Por otro lado, el expresidente de Brasil comenta que su equipo legal está recurriendo a todas las instancias necesarias para que se lea la investigación, con el fin de analizar las acusaciones.
Al mismo tiempo, muchos juristas se preguntan si es legal que un condenado se niegue rehuse a recibir mejores tratos en su privación de la libertad: No sé si la jueza [Carolina Lebbos] puede forzarme a cumplir, no soy abogado. Lo único que sé es lo siguiente: estoy luchando por mi inocencia. Yo fui víctima de un juicio político. En este sentido, el condenado opina que no hay una denuncia verídica, sino que existen muchas mentiras y hay intereses políticos, apuntó Lula.
Analizando el presente del gigante de Sudamérica, el entrevistado entiende que todo fue una maniobra para correr al PT del centro de la escena política: Le dieron el golpe a Dilma [Rousseff] y después del golpe Lula no podría volver a ser presidente, así que fue necesario crear una confusión con Lula.
Además, Da Silva se muestra convencido de que el responsable de este presunto entramado es Moro. Transformó una operación policial en una operación política partidista para tratar de evitar que fuera presidente de la República, era el único propósito.
En cuanto a la investigación del Lava Jato, el líder brasileño reconoce que esa indagación tuvo mérito en algunas cosas. De hecho, considera que se arrestó a personas que confesaron haber robado, y todos los que robaron tienen que ser arrestados, dijo. No obstante, sostiene que en su caso se transformó una operación policial en una operación política partidista para tratar de evitar que fuera presidente de la República.
Sobre ello, menciona algunas de las posibles irregularidades en su proceso de enjuiciamiento: Fui juzgado en Curitiba, aunque debería haber sido juzgado en Sao Paulo. Me acusaron de cosas que no hice, estoy condenado por un departamento que no es mío.
Más allá de su ansiada libertad, para el dirigente lo más importante es que sus adversarios pidan perdón: Después de ochenta portadas de revistas, cientos de horas en televisión, miles de portadas que dicen que Lula era corrupto, ¿cómo van a disculparse ahora con el pueblo brasileño?, comenta.
Más adelante, Lula critica a la actual administración de aquel país latinoamericano: Este Gobierno hasta ahora en Brasil no ha dicho la palabra producir, la palabra crecimiento, la palabra distribución de la renta, la palabra aumento de sueldo. Hasta ahora, este país se está sosteniendo por las reservas que ha creado el PT, sostiene.
Sobre el rol de las potencias mundiales, se muestra orgulloso del papel que ocupa el presidente ruso, Vladímir Putin, en la historia mundial actual: Significa que el mundo no puede ser tomado como rehén por la política estadounidense, acota.
En contrapartida, para referirse al líder de la Casa Blanca, Donald Trump, menciona la locura de un presidente que cree que puede invadir cualquier país y matar a cualquier presidente. Al respecto, afirma que es necesario que alguien detenga eso. Y Brasil puede detenerlo. Brasil tiene tamaño para eso, tiene grandeza para eso, tiene fronteras con diez países de América del Sur, agrega.
El entrevistado explica que en el momento que tienes presidentes que no se respeten, que no respeten su soberanía y que sigan lamiendo las botas de los estadounidenses, como lo hizo Fernando Henrique Cardoso con Clinton y como hace Bolsonaro con Trump, el país no avanzará, e insiste: Este país tiene que ser soberano, enfatiza.
Las elecciones en Argentina, Uruguay y Bolivia nos permitirán soñar con crear un fuerte bloque económico y político en América del Sur, la gente tiene que entender que no podemos, en el siglo XXI, seguir viviendo como hemos vivido durante todos los siglos desde que fuimos descubiertos, indica Lula da Silva.
Finalmente Lula da Silva comenta que «no hay forma de que puedas enfrentarte al odio con más odio. El odio se enfrenta con amor, con humanismo, con amabilidad y solidaridad». También repasa que dejó el gobierno con una alta aprobación popular, pero reflexiona sobre la confrontación actual: La única explicación que encuentro por el odio generalizado contra mí es que hemos hecho que las personas más humildes de este país suban en la escala social, reafirmó.