Foot cover de Noticia Autor: Juventud Rebelde Publicado: 11/06/2018 | 10:23 pm
SINGAPUR, junio 11.— El presidente de EE.UU. Donald Trump y El líder de Corea del Norte Kim Jong-un comenzaron este martes en Singapur la histórica cumbre que reúne por primera vez en la historia a los líderes mundiales.
El saludo de los mandatarios fue un apretón de manos delante de los periodistas frente a las banderas de sus países y a continuación se encaminaron hacia la sala en que tienen previsto reunirse.
Ambos posaron para la prensa y se volvieron a dar la mano momentos después, sentados y separados por una pequeña mesa redonda y decorada con un ramo de flores blancas, respondieron a algunas preguntas de periodistas.
«No fue fácil llegar aquí... Hubo obstáculos, pero los vencimos para estar aquí», expresó Kim, quien nunca antes había respondido a periodistas occidentales».
«Vamos a tener una gran relación», «Me siento muy bien», dijo Trump al comienzo de su conversación.«Vamos a tener un gran diálogo y creo, un tremendo éxito, será tremendamente exitoso y es mi honor; tendremos una relación magnífica, no me cabe duda» señaló Trump refiriéndose a su contraparte.
La cita, augura pasar como un hito de distensión en las tensas relaciones entre ambos países, y los dos mandatarios intentarán llegar a un acuerdo sobre la desnuclearización que abarque incluso la península de Corea en su conjunto.
Le reunión comenzó según la Casa Blancaa las 09:00 hora local de Singapur y, después del saludo inicial, comenzó en el encuentro individual, solo con la presencia de traductores, para después celebrar las otras actividades.
Luego tendrán un encuentro alargado con sus respectivas delegaciones y finalmente un almuerzo de trabajo, según un comunicado de la Casa Blanca.
«Las conversaciones entre Estados Unidos y Corea del Norte están en curso y han progresado más rápido de lo previsto», añadió el comunicado estadounidense.
Por su parte, la agencia de noticias de la RPDC, KCNA, destacó que en la cumbre tratarán «amplios y profundos puntos de vista sobre el tema del establecimiento de nuevas relaciones».
Asimismo, abordarán la cuestión de construir un mecanismo de mantenimiento de la paz permanente y duradera en la península coreana y otros asuntos de interés mutuo, como lo exige la actual era de cambios.
En el encuentro bilateral ampliado estarán presentes por la parte norteamericana, el secretario de Estado, Mike Pompeo; el jefe de Gabinete, John Kelly; y el asesor de Seguridad Nacional, John Bolton; además de la secretaria de prensa de Trump, Sarah Sanders; el embajador Sung Kim; y el director para Asia del Consejo de Seguridad Nacional, Matt Pottinger, se unirán para el almuerzo de trabajo.
Al final de la cumbre, Trump realizará declaraciones a los medios de prensa antes de partir aproximadamente a las 20:00 hora local de regreso a Estados Unidos.
Este lunes el mandatario expresó su gratitud al primer ministro Lee Hsien Loong por el papel de Singapur como anfitrión de la cumbre entre Estados Unidos y Corea del Norte, y reiteró su comentario de que la cosas podrían funcionar muy bien mañana.
En tanto, el secretario de Estado estadounidense indicó que las sanciones «permanecerán hasta que hayan eliminado verificablemente» el programa nuclear. Si no se mueve en la dirección correcta, esas medidas aumentarán, advirtió Pompeo.
La nación asiática ha enfrentado años de aislamiento y sanciones económicas por sus programas nucleares y de misiles, que califica de defensivos y disuasivos ante las amenazas de Estados Unidos y sus aliados, refiere PL.
A finales de mayo desmanteló, como había prometido, su centro de pruebas nucleares de Punggye-ri, en un gesto de buena voluntad dentro de la ofensiva diplomática a favor de la paz que la RPDC emprendió desde inicios de año.
Esta jornada, como parte del impacto internacional de la cumbre Trump-Kim, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, reiteró el apoyo de la organización a los dos líderes en sus esfuerzos diplomáticos.
Guterres felicitó a ambos por su empeño de alcanzar una solución diplomática: el mundo sigue de cerca lo que ocurre en Singapur, dijo a la prensa reunida en la sede de la ONU en Nueva York.