Los últimos años han visto un crecimiento vertiginoso de la carrera armamentista. Autor: Internet Publicado: 21/09/2017 | 05:35 pm
Naciones Unidas, septiembre 20.— Jefes de Estado o de Gobierno, cancilleres y funcionarios de 41 países, entre ellos, Cuba, firmaron este miércoles el Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares, instrumento multilateral adoptado el 7 de julio, según informan varios medios.
En una ceremonia celebrada en el contexto del segmento de alto nivel de la Asamblea General de las Naciones Unidas, esos gobiernos demostraron así su compromiso con un mundo libre de esa amenaza para la humanidad.
Suscribieron el tratado los presidentes de Brasil, Chile, Comoras, Costa Rica, Guyana, Kiribati, Palau, República Centroafricana y Sudáfrica, los primeros ministros de Fiji, Samoa y Tuvalu, y los cancilleres de Argelia, Austria, Bangladesh, Cabo Verde, Costa de Marfil, Cuba, República Democrática del Congo, El Salvador, la Santa Sede, Honduras, Indonesia e Irlanda.
También firmaron la convención el vicepresidente de Panamá, los ministros de relaciones exteriores de Liechtenstein, Malawi, Malasia, México, Nepal, Nigeria, Santo Tomé y Príncipe, Palestina, Paraguay, Tailandia, Togo, Vanuatu y Venezuela, los embajadores de Nueva Zelanda y Uruguay, y un alto funcionario de Perú.
El tratado entrará en vigor cuando lo ratifiquen 50 naciones.
Detalla PL que antes de declararlo abierto a la firma, el secretario general de la ONU, António Guterres, calificó de histórica la iniciativa, de cara al objetivo de eliminar el peligro que representan las armas nucleares.
Guterres reconoció en una breve intervención el compromiso de los países promotores del tratado, el primer instrumento multilateral de desarme logrado en las últimas dos décadas.
La iniciativa aprobada el 7 de julio gracias al respaldo de 122 Estados busca impedir el desarrollo, prueba, producción, adquisición, posesión, almacenamiento y transferencia, así como la amenaza de uso de las armas nucleares.
También recoge la obligación de asistir a las víctimas y de atender los daños ambientales derivados de los ensayos con los letales medios de guerra.
En otro de sus acápites, deja abierta la posibilidad de que los llamados Estados poseedores se incorporen al instrumento.
Los países que cuentan en sus arsenales con armas nucleares, y otros que los apoyaron, no participaron en las negociaciones, mientras potencias como Estados Unidos, Francia y Reino Unido advirtieron que desconocen el acuerdo.
(Tomado de PL)