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BOGOTA, mayo 26.— El presidente colombiano Juan Manuel Santos, derrotado en la primera vuelta electoral del pasado domingo, encaró desde este lunes una difícil campaña en busca de alianzas para recobrar terreno frente al derechista Óscar Zuluaga, fuerte opositor del proceso de paz con las FARC-EP que el actual mandatario impulsó e hizo centro de su campaña política de cara a estos comicios.
En el poder desde 2010 y en busca de la reelección con la promesa de sellar la paz que desde noviembre de 2012 negocia con la guerrilla más antigua de América Latina, Santos salió en desventaja ante su mayor opositor tras una campaña dominada por escándalos de espionaje y corrupción entre los dos finalistas, dijo AFP.
Santos obtuvo el 25,7 por ciento de los votos frente al 29,3 por ciento de Zuluaga, del partido de derecha radical Centro Democrático, —creado y apadrinado por el ex mandatario Álvaro Uribe— tras ser contabilizadas la casi totalidad de las mesas, según la autoridad electoral. El mandatario alcanzó 3 301 815 votos contra 3 759 971 de su rival.
El actual mandatario llamó de inmediato a los colombianos a elegir el 15 de junio entre «el fin de la guerra» o la «guerra sin fin», y tendrá apenas tres semanas para convencer al electorado y buscar alianzas con sectores más progresistas, como el izquierdista Polo Democrático que, con Clara López al frente, alcanzó el cuarto puesto en las urnas con un 15,2 por ciento y a Enrique Peñalosa, del Partido Verde, que obtuvo un 8,2 por ciento, ambos críticos del Gobierno, pero apoyan el proceso de paz.
Este lunes, el candidato opositor reiteró que, de ganar la segunda vuelta electoral, suspenderá «provisionalmente» los diálogos de paz, e hizo exigencias a las FARC-EP, si quieren negociar el fin del conflicto.
Zuluaga detalló un cese unilateral del fuego y que los jefes rebeldes que están acusados de «delitos graves» paguen un mínimo de seis años de cárcel, entre otros reclamos. El candidato podría virarse hacia la conservadora Marta Lucía Ramírez, ex ministra de Defensa de Uribe, y tercera en preferencia con el 15,5 por ciento de los votos y muy cercana a su posición de fuerza contra la guerrilla, en busca de alianzas.
Según DPA, Santos y Zuluaga se apresuraron a enviar mensajes conciliadores a los aspirantes de las otras fuerzas políticas, quienes respondieron que se reunirán con los cuadros directivos de sus campañas para tomar decisiones.
Sin embargo, comenta DPA, donde los candidatos tendrán que salir a buscar los votos será en los abstencionistas. En esta ocasión no acudió a las urnas un 60 por ciento de los casi 33 millones de colombianos habilitados para votar.
