La juventud trabajadora y estudiantil bolivariana continúa organizando sus esquemas de base y estaduale. Autor: Juventud Rebelde Publicado: 21/09/2017 | 05:19 pm
CARACAS.— La juventud trabajadora y estudiantil bolivariana continúa esta semana organizando sus esquemas de base y estaduales para asegurar el próximo 7 de octubre una victoria incontestable de Hugo Chávez en las elecciones presidenciales.
Según las encuestas, más del 60 por ciento de las personas entre 18 y 29 años votarían por el líder revolucionario.
Los números no solo convierten al sector juvenil en una de las grandes plataformas ganadoras del mandatario, también develan que las nuevas generaciones ven en el proceso bolivariano la mejor opción de futuro.
Al parecer, las intenciones de voto demuestran que consideran a la Revolución chavista como el modelo que les puede asegurar un proyecto de vida cercano o superior a sus expectativas de desarrollo material y espiritual.
Y así se ha encargado de demostrarlo el propio proceso: en menos de diez años, sus políticas educativas, por ejemplo, han logrado un crecimiento geométrico en matrícula universitaria, lo cual le ha dado acceso a las mayorías antes excluidas de los estudios superiores.
Al mismo tiempo, o como resultado, la juventud, tanto de las clases populares como de parte de la media, han optado por una mayor militancia política a favor del proyecto.
Hoy sábado, por ejemplo, en los 24 estados del país se realizarán reuniones de alumnos universitarios para ir dando forma definitiva al Gran Polo Patriótico Estudiantil, señaló en un comunicado de prensa la coordinación de Educación Universitaria del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
Esta semana, también en varios estados se ha instalado el Gran Polo Patriótico Juvenil (GPPJ), que entre sus premisas tiene garantizar la unidad y asegurar las elecciones.
Aunque las encuestas indican que Chávez es amplio favorito, las estrategias de desestabilización de la derecha local e internacional están apelando a todos los recursos —mediáticos, económicos y de inteligencia— para manipular la realidad venezolana, boicotear las elecciones, e intentar truncar el proyecto social y político que se lleva adelante en Venezuela.
Según dirigentes juveniles entrevistados por televisoras públicas locales, más de dos millones de nuevos inscritos en el registro electoral votarán por Chávez. Y parecen dispuestos a asegurar esos números con mucha agresividad y sin ningún descanso. «Sí, jóvenes y chavistas», dicen sin tapujo.