Luego del asesinato a los soldados, los paquistaníes se lanzaron a las calles para protestar contra la presencia de la OTAN en el país. Autor: AP Publicado: 21/09/2017 | 05:15 pm
ISLAMABAD, noviembre 26.— El Gobierno de Paquistán acusó este sábado a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) por el asesinato de unos 26 soldados de su Fuerza Armada cerca de la frontera con Afganistán, episodio considerado por las autoridades como el peor en diez años y que provocó una nueva crisis entre Islamabad y sus aliados occidentales.
Los medios locales del país asiático reseñaron que el ataque de la OTAN fue perpetrado en horas de la madrugada, puntualmente en la noroccidental región tribal de Mohmand, en la frontera entre Paquistán y Afganistán, localidad que, según las autoridades paquistaníes, está bajo el control de la red Al Qaeda, reportó Telesur.
En una primera reacción al ataque, el Gobierno paquistaní condenó en los términos más enérgicos a la Alianza, así como ordenó cerrar el paso de Jíber, por donde fluye el 50 por ciento del combustible y de los suministros que reciben las tropas occidentales acantonadas en la vecina nación.
Además dio a la OTAN un plazo de 15 días para desalojar la base aérea que ocupa en la suroriental provincia de Balochistán, y en una declaración, el comandante del ejército paquistaní, Ashfaq Pervez Kayani, advirtió que tomará «serias acciones» de represalia, si en el futuro se repiten este tipo de incidentes por parte de la Alianza atlántica, dijo Notimex.
Pervez Kayani describió que «sin ningún tipo de provocación» los helicópteros de la OTAN abrieron fuego contra el puesto de control y asesinaron a los militares e hirieron a otros 14.
Se trata de una grave ofensa a la soberanía nacional, no podemos seguir tolerando estos ataques, dijo, por su parte, Masood Kausar, gobernador de la provincia de Khyber Pakhtunkhwa, donde se asientan los distritos tribales paquistaníes, informó PL.
El año pasado, también cerca de la frontera con Afganistán, helicópteros artillados de Estados Unidos mataron a dos soldados paquistaníes, después de lo cual Islamabad cerró temporalmente el paso a las provisiones para las tropas ocupantes de Afganistán.
La OTAN, por su parte, confirmó el ataque, ofreció disculpas por las víctimas y prometió una investigación detallada del incidente.