El jefe del gobierno español espera que los comicios le den «certidumbre» al futuro del país ibérico. Autor: Reuters Publicado: 21/09/2017 | 05:12 pm
MADRID, julio 29.— El presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, puso fin este viernes a meses de especulaciones y adelantó las elecciones generales para el próximo 20 de noviembre, en medio de la grave crisis económica que atraviesa el país, el fuerte desempleo y la creciente presión de los mercados financieros sobre España, reportó DPA.
El Ejecutivo socialista había tratado una y otra vez de frenar el debate sobre la posibilidad de comicios anticipados, asegurando que se mantendría en el cargo hasta el fin previsto de la legislatura, en marzo de 2012. Pero Zapatero decidió finalmente adelantar al 20 de noviembre la cita ante las urnas, en la que los sondeos auguran desde hace meses una holgada ventaja del derechista Partido Popular (PP), de Mariano Rajoy, frente al oficialista Partido Socialista Obrero Español(PSOE).
Zapatero, de 50 años, había anunciado ya en abril que no aspiraría a una segunda reelección, en medio de su baja popularidad. Su manejo de la crisis económica lo convirtió en el presidente del gobierno español peor valorado de la historia, incluso por debajo de Felipe González cuando su gabinete se encontraba inmerso en escándalos de corrupción, o de José María Aznar cuando decidió mandar soldados a Iraq.
Lo que más preocupa a los españoles es el desempleo récord, que a finales de junio afectaba a 4,83 millones de personas (el 20,89 por ciento de la población activa). Según cifras oficiales publicadas el viernes, el paro se redujo en 76 500 personas en el segundo trimestre, menos de lo pronosticado por los analistas para el comienzo de la temporada alta en el sector turístico, una de las principales fuentes de ingresos del país.
En más de 1,3 millones de hogares, todos sus miembros están desempleados, mientras que el paro juvenil se encuentra en un 46 por ciento, más que en ningún otro país de Europa.
Zapatero, quien en los primeros años de su mandato implementó medidas como la entrega de un cheque por cada hijo nacido, reaccionó en los últimos meses a las presiones de los mercados y la Unión Europea con recortes sociales, como una bajada de sueldo a los funcionarios, la congelación de las pensiones, la elevación de la edad de jubilación y la facilitación de los despidos.
Como consecuencia, el PSOE sufrió un fuerte descalabro en las elecciones municipales y autonómicas del pasado 22 de mayo, mientras las calles del país eran escenario de multitudinarias manifestaciones. El clima de descontento llevó al surgimiento del llamado movimiento de los «indignados».
A la carrera por la presidencia del gobierno concurrirá, por el PSOE, el veterano ex vicepresidente Alfredo Pérez Rubalcaba, quien hasta principios de este mes era, según sondeos, el candidato preferido por los españoles, frente a Mariano Rajoy, líder del PP, quien ya ha perdido las dos últimas elecciones generales.