Las protestas también continuaron en Yemen. En la foto, manifestantes arrojan piedras a un vehículo de un partidario del Gobierno. Autor: Getty Images Publicado: 21/09/2017 | 05:06 pm
TRÍPOLI, febrero 22.— El líder Muammar al-Gaddafi atribuyó este martes las manifestaciones opositoras en esta capital y varias ciudades de Libia a lo que calificó como un complot diabólico de Occidente, y urgió a la población a defender los logros económicos y sociales de su Gobierno, reportó PL.
En una extensa alocución televisiva, al-Gaddafi acusó de «traidores y cobardes» a quienes pretenden llevar el país al caos y orientó que los jóvenes «llevarán un brazalete verde en señal de fidelidad y de defensa de la revolución», al tiempo que prometió luchar «hasta la última gota de sangre seguido por el pueblo».
El líder libio remarcó, por segunda vez en el día, que sigue al frente de la revolución, y descartó huir a otra nación forzado por las mayores revueltas callejeras que enfrenta en sus casi 42 años de mandato.
Instruyó que se creen milicias ciudadanas para garantizar el orden, y que estas deberán actuar en coordinación con los comités populares, instancias leales a su Gobierno y diseminadas por todo el territorio junto con las fuerzas de seguridad. Esas estructuras —añadió— deberán defender el petróleo de Libia, los proyectos de promoción de vivienda y otros logros.
«Libia está en peligro, nuestra soberanía está en peligro», enfatizó sosteniendo un ejemplar del Código Penal del país mientras leía varios artículos que estipulan la pena de muerte para quienes traicionen, pongan al país al servicio del extranjero o atenten contra el ejecutivo.
También se supo que medios de prensa estadounidenses exhortaron a la violencia en la nación africana. El diario The Wall Street Journal exhortó a Washington y Europa a armar a los manifestantes libios para derrocar a Gaddafi, e instó a ambas potencias a amenazar con bombardear las bases aéreas libias, al tiempo que The Washington Post abogó por «amplias sanciones, incluida la industria petrolera», reseñó AFP.
Según ANSA, el ministro del Interior libio, Abdel Fatah Younis al Abidi, a quien al-Gaddafi dio por muerto en su discurso, se unió el lunes a las revueltas e instó a los militares a apoyar los «reclamos legítimos».
Por su parte, la Liga Árabe, reunida de urgencia en El Cairo, excluyó a Libia de sus reuniones por lo que consideró «crímenes contra las actuales protestas pacíficas», a pesar de que la nación del norte de África ocupa la presidencia rotatoria.
También el Consejo de Seguridad de la ONU se reunió dos veces el martes para abordar la crisis política por la que atraviesa Libia y planear una condena al país africano.
Mientras, la alta representante de la Política Exterior de la Unión Europea, Catherine Ashton, anunció que el bloque comunitario suspenderá el acuerdo marco con Trípoli, actualmente en proceso de negociación.
Se supo además que en Bahrein, otros de los países sacudidos por manifestaciones antigubernamentales, decenas de miles de chiitas protagonizaron la mayor protesta en Manama, la capital, a pesar del indulto real a prisioneros políticos y el aplazamiento de los juicios contra otros para facilitar un diálogo de reconciliación, dijo AFP.
Desde Yemen, trascendió que al menos dos personas murieron y otras 11 resultaron heridas debido a un ataque de un grupo de seguidores del Gobierno contra estudiantes que hacían una sentada en la Universidad de Sanaa pidiendo la renuncia del presidente Ali Abdullah Saleh, ANSA.