TEGUCIGALPA, enero 27.— Marchas y bloqueos de carreteras protagonizaron organizaciones populares en varios departamentos de Honduras en repudio a las políticas del Gobierno de Porfirio Lobo, que cumple este jueves su primer año en el poder.
En Tegucigalpa, la capital hondureña, una manifestación partió de la Universidad Pedagógica Francisco Morazán para exigir el cese de la represión y el retorno al país del ex presidente constitucional Manuel Zelaya, depuesto por el golpe de Estado del 28 de junio de 2009, reportó PL.
Durante varias horas miles de personas se concentraron frente a las sedes de la Corte Suprema de Justicia y el Congreso Nacional para demandar también castigo a los responsables de la ruptura institucional.
Mientras, en San Pedro Sula, segunda ciudad en importancia del país, también se registraron disturbios y bloqueos de carreteras.
Los manifestantes repudiaron los asesinatos de campesinos en el Valle del Aguán y la decisión de la Corte Suprema de Justicia de declarar inconstitucional un decreto aprobado durante el Gobierno de Zelaya que autorizaba a campesinos a cultivar tierras ociosas, al tiempo que rechazaron también las políticas privatizadoras en el sector de la educación, la militarización en el norte del país y el alza del costo de la vida.
Siete meses después del golpe de Estado que sacó abruptamente a Zelaya, Lobo asumió el poder y desde entonces la situación socioeconómica y política de Honduras ha empeorado, según afirmó el propio Zelaya.
«El balance del Gobierno de Lobo, a un año de mi exilio forzado e ilegal, muestra resultados desalentadores y negativos», expresó el ex presidente en una carta al pueblo hondureño desde República Dominicana, donde se encuentra desde su salida del país.
Por otra parte —dijo— el desempeño económico ha sido negativo, con un declive en todos los indicadores básicos, mayor endeudamiento, aumento del precio de la canasta básica, de los combustibles y la energía eléctrica.