Jefes de Estado y Primeros Ministros del grupo de naciones en desarrollo con grandes poblaciones musulmanas decidieron promover y fortalecer una cooperación Sur-Sur viable. Autor: Reuters Publicado: 21/09/2017 | 04:59 pm
LAGOS, julio 9.— El presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, manifestó este viernes que el programa nuclear de su país no sufrirá cambios a pesar de las sanciones impuestas a su nación por el Consejo de Seguridad de la ONU, durante su visita a Nigeria para la Cumbre del grupo de países en desarrollo de población musulmana (D8), reportó EFE.
«No habrá el menor cambio en nuestro programa nuclear», recalcó Ahmadineyad, quien se reunió en Abuya con los gobernantes de Bangladesh, Egipto, Indonesia, Malasia, Nigeria, Paquistán y Turquía, los otros siete países del grupo.
El mandatario iraní reiteró su condena a las últimas sanciones impuestas a su país por el Consejo de Seguridad de la ONU y enfatizó que no le impedirán proseguir con su programa nuclear con fines pacíficos.
Ahmadineyad también catalogó a Estados Unidos como una potencia dictadora y aseveró que no tiene ningún derecho a entrometerse en los asuntos internos de ningún país, al tiempo que defendió la creación de un Estado palestino en el Medio Oriente y condenó a Israel.
En la Cumbre, los gobernantes del grupo D8 decidieron promover y fortalecer una cooperación Sur-Sur viable, con vistas a un mayor crecimiento económico y participación activa en el proceso de globalización.
En tanto, un sondeo de opinión realizado por el canal satelital Press TV en Teherán arrojó que más del 75 por ciento de los iraníes cree que las ocho potencias más industrializadas han intensificado su ofensiva hostil hacia la nación persa con dobles e innobles intenciones, y que intentan ocultar los fracasos económicos del grupo y la falta de consenso para solucionarlos, informó PL.
Además, el 11 por ciento de los encuestados afirmó que las naciones del G-8 exclusivamente están esforzándose por desviar a la opinión pública del tema de su debacle económica, y más del 3 por ciento opinó que solo busca disimular la falta de consensos.
Más del 10 por ciento consideró que Irán es más importante que los percances económicos y financieros del G-8, bloque que el pasado mes encabezó una intensa campaña diplomática a favor de la plena aplicación de la resolución 1929 del Consejo de Seguridad de la ONU, la cual impuso un cuarto paquete de sanciones económicas contra la República Islámica para forzarla a abandonar su programa atómico.