El gobierno mexicano decretó estado de emergencia. Autor: Internet Publicado: 21/09/2017 | 04:54 pm
Al menos 32 personas murieron este fin de semana en Michoacán (sur) y los estados centrales de México y Guanajuato, como consecuencia de las fuertes precipitaciones que se registraron el pasado jueves y viernes, en donde más de 50 mil mexicanos quedaron afectados.
El Gobierno de esa nación decidió decretar el estado de emergencia en los 12 municipios más afectados, los pertenecientes a Ciudad de México: Gustavo A. Madero, Iztacalco, Venustiano Carranza e Iztapalapa; y los cercanos: Michoacán, Angangueo, Tuxpan, Tuzantla, Ocampo, Tiquicheo de Nicolás Romero, Ecatepec de Morelos, Nezahualcóyotl y Valle de Chalco Solidaridad.
La Secretaría de Gobernación señaló que la declaración de emergencia permitirá a las autoridades utilizar recursos federales para atender las necesidades alimenticias, de abrigo y salud de la población afectada.
El alcalde de Ciudad de México, Marcelo Ebrard, anunció el pasado sábado que entregará un bono de 115 dólares aproximadamente por viviendas afectadas y para aquellas familias que no han podido acudir a sus puestos de trabajo, o que poseen negocios propios que resultaron afectados por las precipitaciones.
Tan sólo en el Valle de México y en Michoacán se han contabilizado más de 40 mil damnificados.
En los estados de Guanajuato y Querétaro, dos mil 600 personas tuvieron que ser desalojadas de emergencia ante la crecida de algunos ríos.
En la capital fueron suspendidas las actividades en 174 escuelas, mientras que en el estado de México unos 585 centros educativos no pudieron abrir sus puertas el pasado viernes, las inundaciones alcanzaron en algunas zonas los 3 metros de altura.
Por otro lado, unas 72 colonias de la capital mexicana se encuentran sin luz y cinco estaciones del metro tuvieron que suspender el servicio por varias horas al inundarse las vías del tren y por los cortes de electricidad que han sido constantes.
Ante la situación que vive México, el Ejército de esa nación implementó el plan DN-III, que se aplica para atender a la población en casos de desastre en Michoacán y Estado de México.
El personal del Ejército trabaja para recuperar la normalidad en las zonas afectadas, principalmente en la capital del país.
Asimismo, sus labores se centran para evitar focos de infección que generan epidemias por el agua contaminada.