Las armas de alta tecnología utilizadas por las fuerzas invasoras en Iraq provocaron un número desproporcionadamente alto de víctimas mortales entre las mujeres y los niños, reveló un grupo de investigadores en The New England Journal of Medicine.
Utilizaron como base de datos 60 481 civiles muertos violentamente durante los primeros cinco años de la guerra, según compilación de Iraq Body Count, organización no gubernamental que ha documentado esas muertes para determinar la naturaleza y los efectos de varios armamentos.
El número impactante de víctimas inocentes se debe al empleo por parte de Estados Unidos de bombardeos aéreos en combates urbanos, los que provocaron que el 46 por ciento de las bajas mortales fueran mujeres y el 39 por ciento niños. El documento subraya que «el daño indiscriminado o intencional a civiles viola los principios humanitarios y los derechos humanos básicos».