QUITO, enero 31.— El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, saludó el anuncio de Colombia de desplegar más efectivos en su frontera sur, pero aclaró que faltan otros requerimientos para reanudar las relaciones diplomáticas entre ambos países.
Con esa decisión, el mandatario colombiano, Álvaro Uribe, reconoció un problema de inseguridad en su zona limítrofe sur, pero no es suficiente, resaltó Correa. «Son cinco cosas las que ha pedido Ecuador, para reanudar las relaciones con Colombia, y esta decisión solo cumple uno de esos puntos», remarcó.
Según PL, en su alocución de este sábado, el presidente ecuatoriano recalcó la necesidad de que Bogotá ponga fin a la campaña para vincular a su gobierno y a funcionarios ecuatorianos con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
«Antes del bombardeo a la zona ecuatoriana de Angostura, el 1ro. de marzo último, Uribe me invitaba a su país, pero tras la agresión que motivó el rompimiento de las relaciones, ahora nos vincula con las FARC», cuestionó.
Además de cuidar su frontera para evitar que ingresen a Ecuador grupos paramilitares e insurgentes, el gobierno vecino debe entregar toda información relacionada con ese ataque.
«Las bombas que se lanzaron fueron norteamericanas, pero todavía no tenemos certezas de quién las lanzó (...) Uribe se comprometió en Santo Domingo a dar esa información», aseveró.
Correa destacó que se exigió, además, a Bogotá ayudar al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) a compensar el gasto que el país realiza en la atención a los miles de desplazados colombianos, que abandonan su territorio por el conflicto armado.