Boris Bezerovski y Andrei Lugovoi, en el Cáucaso en 1999. Actualmente, Londres pide a Moscú la extradición del segundo, pero a la vez rechaza entregar a Rusia al primero, que ha instado a derribar al presidente Vladimir Putin por medios violentos. Foto: AP. MOSCÚ, julio 17.— Rusia dará una «respuesta precisa» y «adecuada» a la expulsión de cuatro de sus diplomáticos por parte de Gran Bretaña, país al que «le faltarían 80 diplomáticos» en Moscú, si el gobierno ruso adoptara los mismos métodos que Londres, dijeron fuentes gubernamentales citadas por AFP.
«Nuestra reacción será precisa y adecuada, y las autoridades británicas serán informadas en breve», dijo el viceministro ruso de Relaciones Exteriores, Alexander Gruchko, en la cadena de televisión estatal Vesti 24.
«Tomaremos en consideración completamente los intereses de los ciudadanos, los turistas, y de quienes participen en intercambios culturales y académicos. No queremos que ellos sufran como resultado de las acciones de Londres», añadió.
El ministro de Relaciones Exteriores británico, David Miliband, anunció el lunes la expulsión de cuatro diplomáticos rusos por la negativa de Moscú a extraditar a Andrei Lugovoi, principal sospechoso del asesinato del ex agente de la KGB (la agencia de espionaje rusa), Alexandr Litvinenko, ocurrido en Londres en 2006.
«Si la parte rusa hubiese adoptado la vía escogida por Londres, pienso que a la embajada de Gran Bretaña en Moscú le faltarían 80 diplomáticos», agregó Gruchko.
El viceministro aludió así al rechazo de Londres a extraditar al hombre de negocios Boris Berezovski, un personaje que ha llamado a derrocar al gobierno ruso por vías violentas, así como al emisario en Europa del difunto líder rebelde checheno Aslan Masjadov, Ajmad Zakayev.
Berezovski y Zakayev obtuvieron asilo político en Gran Bretaña.
Asimismo, Gruchko insistió en que la negativa rusa a entregar a Lugovoi, principal sospechoso del asesinato de Litvinenko, se basa en la Constitución, que prohíbe expresamente la extradición de un ciudadano ruso.
A Rusia «la intentan castigar por cumplir su propia Constitución, lo que es injusto, inaceptable y se contradice con el sentido común», enfatizó, según EFE.
Moscú hizo un llamado a los países de la Unión Europea a no dejarse «instrumentalizar», en un momento en que Londres prevé apelar a la cooperación de sus aliados europeos en su conflicto con el Kremlin.
«Esperamos que el buen sentido predominará en la UE y que sus miembros no se dejarán llevar por nuevas tentativas para transformar las relaciones entre Rusia y la UE en una suerte de instrumento para servir a objetivos políticos unilaterales», aseguró Gruchko.
Entretanto, Andrei Lugovoi, el ex miembro del KGB reclamado por Londres, que ahora se dedica a los negocios en Moscú, refirió al diario ruso Izvestia que «la decisión de Gran Bretaña no tiene ningún efecto sobre mi vida. Mi familia y mis negocios están en Rusia, y no tengo intención de ir a ningún lado, me siento bien aquí».
Según la Fiscalía británica, hay pruebas suficientes para procesar a Lugovoi por el asesinato de Litvinenko, antiguo agente del KGB que murió el 23 de noviembre pasado de 2006 envenenado con polonio 210.