Según una encuesta realizada por la revista alemana Geo Saber, al reagrupar hipotéticamente el tiempo que destinamos los seres humanos a las distintas actividades cotidianas, cuando llegamos a los 78 años (esperanza de vida promedio en países desarrollados) ya nos pasamos casi 25 durmiendo.
Por si ya empezaron a sacar cuentas, la diversión parece mucha cuando se trata de estar frente a una pantalla de TV, cine o teléfono (más de 15 años) y entre comer y beber se nos escapan otros cinco… En cambio a las prácticas sexuales apenas les dedicamos seis semanas en total, con la esperanza de obtener, con suerte, unas 16 horas de orgasmo.
En los países latinos esas cifras no son muy diferentes a las europeas. Por acá, destinamos cerca de un año a lavar y limpiar la casa y no menos de seis a hacer colas… ¿o será al revés?