Siempre hay una necesaria atención clínica para valorar problemas de salud y medicamentos que condicionan los cambios en la respuesta sexual que no se solucionan con el sildenafil. Los funcionamientos diferentes responden tanto a los cambios físicos de la edad, como a otros subjetivos, incluyendo a la pareja misma
P.D.: Padezco disfunción eréctil y eyaculación precoz. Aunque en ocasiones tomo sildenafil (viagra), no me puedo confiar. Mi mujer también vive su menopausia. Pasamos tiempo sin hacer el amor. No queremos separarnos, pero es una situación incómoda. Me atiendo la disfunción, pero quisiera saber qué me pueden aconsejar. Tengo 51 años y ella 52.
Nos detendremos en la arista sicológica del tema, advertidos de que puede haber problemas de salud y cambios en el modo de funcionamiento de ambos organismos condicionantes de esa situación.
Llama la atención que valoren distanciarse tomando de pretexto estas disfunciones. Cuando queremos acallar otros sinsabores de la relación o de la vida, puede apagarse la chispa del deseo y la entrega íntima. No son pocas las parejas que ven en las disfunciones lo que quieren ignorar de otros funcionamientos de la relación.
Otra arista es la de consentir los cambios físicos. El organismo funciona a un ritmo diferente. Con el envejecimiento llega el llamado a descubrir el erotismo en otras dimensiones. Muchos aprenden a disfrutar lo que ese nuevo cuerpo y la vida subjetiva permiten. Tal vez no es la misma turgencia o lubricación, pero sí placer en un punto posible, cercano a los ideales.
Siempre hay una necesaria atención clínica para valorar problemas de salud y medicamentos que condicionan los cambios en la respuesta sexual que no se solucionan con el sildenafil. Los funcionamientos diferentes responden tanto a los cambios físicos de la edad, como a otros subjetivos, incluyendo a la pareja misma.
Mariela Rodríguez Méndez, máster en Sicología clínica